Miércoles, 19 de junio de 2024
Introducción
Contenidos
- Introducción
- Resumen histórico
- Monumentos y puntos de interés
- Agradecimientos
- Glosario
- Como llegar
- Bibliografía y enlaces externos
- Mapa de los Monumentos y puntos de interés
El municipio de Villamanta, integrado en el Partido Judicial de Navalcarnero, tiene 63,600 km2 de superficie y se encuentra situado a unos 63,6 km de Madrid, a una altitud de 561 metros. Limita, al Norte, con Villamantilla, Villanueva de Perales y Sevilla la Nueva; al Este, con Navalcarnero; al Sur, con los municipios de la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha de Valmojado y Méntrida; y al Oeste, con Aldea del Fresno. Su población, según el padrón de habitantes del 1 de enero de 2023, era de 2.774 personas.
El origen de su nombre, Villamanta, es un tanto desconocido, si exceptuamos que éste provenga de la antigua Mantua Carpetanorum, ciudad con la que es identificada en las Relaciones Histórico-Geográfico-Estadísticas de los pueblos de España, o Relaciones Topográficas de Felipe II1, siguiendo las opiniones de Pedro de Esquivel (Alcalá de Henares, p.m.s.2 – c.3 1570) y Ambrosio de Morales (Córdoba, 1513 – 1591), cronistas, respectivamente, de Carlos I (1516-1556) y Felipe II (1556 – 1598).
Mantua Carpetanorum era una de las 18 ciudades carpetanas mencionadas por Ptolomeo, astrónomo griego del siglo II. A pesar de tener una entidad similar a las de Toletum, Complutum o Titulcia, aún se desconoce cual era su localización, habiéndose debatido anteriormente si esta podía corresponder a las de Madrid o Talamanca de Jarama. Actualmente, estas dos opciones están descartadas en favor de Villamanta y del antiguo término municipal de Perales de Milla, hoy repartido entre Quijorna y Villanueva de Perales.
El relieve del municipio, formado por lomas y anchos valles, carece de grandes accidentes geográficos y cuenta con varios cursos fluviales, entre los que destaca sobremanera el arroyo Grande. Éste, de corriente Este-Oeste hacia el río Alberche, discurre por el centro del término, lindando por el Sur con el núcleo de población de Villamanta. Consultando la cartografía rasterizada de Nomecalles, los otros cursos, en su mayoría estacionales y afluentes del arroyo Grande, son, entre otros, por la margen derecha –recordemos que la derecha e izquierda de las márgenes dependen del sentido de la corriente, por lo que, en este caso, la derecha será por el Norte–, los arroyos de Valdeciervos y de Antón, y los barrancos de los Conejos, del Pozo y de los Zarzones;y por la margen izquierda (por el Sur), los Arroyos de la Huerta de Mancheguillo, del Agua de Riaza y de las Juntas. Otro curso que fluye por el Sur del término en dirección al río Alberche es el arroyo de Valquejigoso.
Por lo que respecta al clima, los inviernos en Villamanta son fríos, con precipitaciones escasas, mientras que los veranos son calurosos y secos.
En cuanto al ámbito forestal, Villamanta cuenta, en el Oeste, con encinares y chopos, aunque la superficie de los primeros ha ido disminuyendo al transformarse en terreno agrícola; en el Norte, se concentran los cultivos de regadíos, especialmente en el valle, mientras que los se secano se localizan en el Este. Finalmente, en el Sur, crecen los matorrales.
Las principales vías de comunicación que tiene Villamanta son las carreteras M-507, que cruza el municipio de Este a Oeste, pasando por el centro del pueblo, y la M-530, que lo hace de Norte a Sur, atravesando también la población. Como leemos en la página 499 del tomo XIII de “Arquitectura y Desarrollo Urbano. Comunidad de Madrid (zona Sur)”, al parecer, existió una calzada medieval que iba de Villamanta a Villamantilla para llegar hasta Galapagar.
Además de otras vías de menor entidad, es interesante destacar que, desde la Edad Media, por el municipio, de Norte a Sureste y rodeando el núcleo de población, pasaba la Cañada Real Segoviana, encontrándose en el término el descansadero de Puente, muy cerca del pueblo, y el abrevadero de las Juntas.
En distintas localizaciones del término municipal de Villamanta, algunas de ellas junto a la Ermita de la Soledad y en ambas márgenes del arroyo Grande, han aparecido algunos yacimientos arqueológicos de época romana tardía, correspondiendo los más antiguos (tejas y cerámica) al siglo I. En cuanto al antiguo poblamiento del lugar, conforme a los asentamientos hallados –ninguno de ellos de la entidad que debía tener a Mantua, parece que éste comenzó en el siglo II y continuó hasta el IV. No obstante, alguna fuente cita la existencia de restos de edificios romanos del siglo II a.C. en el subsuelo.
No obstante, los orígenes del actual núcleo urbano son más recientes, correspondiendo a la repoblación iniciada por pastores segovianos en el siglo XII. Esta expansión daría lugar en el siglo XIII a la creación de, entre otros, el sexmo4 de Casarrubios del Monte. En 1270, la ciudad de Segovia, con objeto de aumentar el escaso poblamiento de este sexmo, donó a Garci Martínez 20 aranzadas5 de tierra situadas en el Viso6 de Calataia, donde estaba la antigua fortaleza árabe de Calatalifa. De lo escasa de su población puede servir de referencia que en la donación sólo son mencionados los tres lugares de Navaleche, Avuy de Vinnas y Villamanta. Hoy, únicamente pervive este último.
Durante la primera mitad del siglo XIV, Alfonso XI “el Justiciero”, rey de Castilla entre 1312 y 1350, separa el sexmo de Casarrubios del Monte de Segovia y lo dona a Alfonso Fernández Coronel.
Precisamente, en el “Libro de la Montería”, de Alfonso XI, realizado entre 1340 y 1350, se menciona Villamanta en repetidas ocasiones. A veces, está escrito como Villamanta y otras, como Villa Manta.
En el tomo II de dicha obra, editado por la imprenta y fundición de Manuel Tello en 1877, podemos leer, en el capítulo IX “De los montes de tierra de Ávila, et de Cadahalso, et de Sant Martin de Val de Iglesias, et de Val de Corneja”, en el apartado ”En derredor de Cadahalso, et de San Martin hay estos montes”, en la página 151:
“Et otro dia viernes tomamos este monte, et falláronle la salida de Val de Infierno, que fué comer las colmenas de Villamanta, Fernant Martinez de Baena, et Pero Gil nuestros monteros que iban en esa busca, et leváronle por el rastro fasta que levantaron entre las Barrasqueras, et el soto de Villamanta, et posiéronle ocho canes”.
Igualmente, en el capítulo XV “De los montes de tierra de Maydrit et de Alhamin”, en el apartado “En tierra de Alhamin hay estos montes (I)”, en la página 227, tenemos:
“El monte, que es entre Verciana, et Villa manta, es buen monte de puerco todo en tiempo de los panes, et en tiempo de la otoñada, et este non há vocería, nin armada cierta; pero que es muy buen monte de andar el de caballo por dó quisiere tanto como el venado”.
Y en la página 228:
“El monte de Nava Retamosa, que es encima de Villa manta es buen monte de puerco en ivierno, et en tiempo de panes”.
[...]
“El monte de la Sarzuela es buen monte de puerco en la otoñada. Et son las vocerías la una por el camino que vá de la Sarzuela á Villa manta: et la otra desde Villa manta por el camino que vá á Perales fasta Val de Tablas. Et son las armadas por el camino que vá de Sarzuela á Perales”.
En 1352, Pedro I “el Cruel”, rey de Castilla entre 1350 y 1369, le confisca sus propiedades a Alfonso Fernández y se las dona a Diego Gómez de Toledo.
En 1468, hay un nuevo cambio de señor cuando Enrique IV, rey de Castilla entre 1425 y 1474, dona el sexmo de Casarrubios, con sus distintos lugares –entre los que se cita a Villamanta–, al comendador de Montiel, además de mayordomo de la princesa Isabel, don Gonzalo Chacón, que pasa a ser señor de Casarrubios y Arroyomolinos.
Comenzamos este siglo consultando el Tomo I del Censo de Pecheros7 de Carlos I, de 1528, en el que vemos que Villamanta es nombrada como Villa Almanta y continúa formando parte de los lugares de don Gonzalo Chacón, estando integrada en la Intendencia de Madrid. Cuenta con una población de 177 pecheros, de los que 139 son enteros, 22 viudas y 16 niños. El pecho abonado por la localidad ha sido de 10.518 maravedíes9. Esto nos da un aporte por vecino de 59,42 maravedíes, pero, como normalmente las viudas y niños pagaban como medio pechero, puede ser que los enteros pagasen 66,57 maravedíes y las viudas y niños, sólo 33,29.
De los lugares de don Gonzalo, leemos en este censo que “Estos pueblos tienen buenas cosechas de pan y vino y hay bastante ganado”.
Seguimos con las Vecindades de la provincia de Segovia, de 1533, en donde vemos la ausencia de Villamanta. A pesar de que el sexmo de Casarrubios continúa existiendo, Villamanta ya no forma parte de él, y tampoco, algo más llamativo, el propio Casarrubios. Y es que, como leemos en la página 503 del tomo XIII de “Arquitectura y Desarrollo Urbano. Comunidad de Madrid (zona Sur)”, ya mencionado, entre los años 1480 y 1594, las localidades de Casarrubios y Villamanta, además de las de Retamosa, Valmojado, El Álamo y Arroyomolinos, fueron separadas del sexmo de Casarrubios.
Antes de continuar con las Relaciones de Felipe II, debemos señalar que, durante este siglo, Villamanta sufrió varias epidemias cuyas cifras de muertes provocaron la disminución del número de habitantes. Entre ellas, por su gran mortandad, destaca la del año 1557.
Pasamos a las Relaciones Histórico-Geográfico-Estadísticas de los pueblos de España, o, como ya dijimos, las Relaciones Topográficas de Felipe II, cumplimentadas, en lo tocante a Villamanta, el 3 de febrero de 1576. Los vecinos encargados de contestar, ante el escribano público Bartolomé Sevillano, al cuestionario de preguntas –un cuestionario que no siempre es igual en todos los pueblos– fueron los clérigos Alonso Vázquez y Juan González Vallejo, además de los vecinos Gonzalo de Lope, Pedro de Pinto el Viejo y Alonso Hernández, también clérigo. Para saber de estas respuestas, consultamos el libro “Relaciones Topográficas de Felipe II”, de Francisco Javier Hernando Ortego y Carlos de la Hoz García, y editado por el Instituto de Estudios Madrileños en el año 1987.
A la pregunta I, sobre el origen de su nombre, la respuesta fue que siempre se ha llamado así, desconociéndose el origen de su nombre, salvo lo expresado por los cronistas Pedro de Esquivel y Ambrosio de Morales. Un cuestión ésta de la que ya hemos tratado en la introducción de esta página.
A la pregunta II, sobre la población y si ésta aumenta o disminuye, la respuesta fue que había ciento veinte vecinos, poco más o menos lo que años anteriores, al estar los edificios arruinados y enterrados bajo tierra (no hay viviendas que hayan quedado abandonadas últimamente).
A la pregunta III, sobre qué tipo de población es, y desde cuándo lo es, se contestó que era un lugar, una aldea de la villa de Casarrubios, a cuya jurisdicción pertenecía.
A la pregunta IV, sobre el reino, provincia y comarca a la que pertenece, la respuesta fue que al de Toledo.
A la pregunta VI, sobre su escudo de armas, que no tenía.
A la pregunta VII, sobre el señor del lugar, que éste era don Francisco Chacón, señor de Casarrubios.
A la pregunta VIII, sobre los repartimientos, que para pagar los servicios que se pagan al rey los repartimientos se hacen en la villa de Casarrubios.
A la pregunta IX, sobre la chancillería10 a la que pertenece, que ésta es la de Valladolid, distante 30 leguas11 de Villamanta.
A la pregunta X, sobre la distancia que hay hasta la villa de cuya jurisdicción depende, en este caso, Casarrubios, que ésta está a dos leguas para los casos de más de cien maravedís, que para los de cien tiene jurisdicción la propia Villamanta.
A la pregunta XI, sobre el arzobispado, obispado, abadía y/o Arciprestazgo12, y la distancia hasta la catedral, que éstos eran el arzobispado de Toledo y el arciprestazgo de Canales, estando a nueve leguas de Toledo.
A la pregunta XIII, sobre el pueblo más cercano hacia el Oeste y la distancia a la que se encuentra, la respuesta fue que Sacedón, a dos leguas.
A la pregunta XIV, idéntica a la anterior, pero hacia el Sur, éste era Casarrubios, a dos leguas.
A la pregunta XV, idéntica a la anterior, pero hacia el Oeste, éste era “Aldea el Fexno”, a legua y media.
A la pregunta XVI, idéntica a la anterior, pero hacia el Norte, éste era Perales de Milla, no existiendo respuesta sobre la distancia (al menos en la obra consultada).
A la pregunta XVII, sobre la calidad de la tierra, si es fría o caliente, llana o de montes, sana o enferma, las respuestas fueron que era tierra templada; con un valle grande y vega a lo largo de dos leguas y media, además de otros puntos de valles y cerros, y tres leguas de sierra y tierra rasa, que ni muy sana ni muy enferma.
A la pregunta XVIII, sobre si hay leña o de dónde se proveen en caso de que ésta falte, la respuesta fue que hay falta de leña, proveyéndose de ella de las plantas y de la Tierra de Segovia, con la cual está en comunidad de pastos y aprovechamiento.
A la pregunta XX, sobre los ríos que pasan por el territorio y su caudal, la respuesta fue que por la localidad pasaba el arroyo Grande, conocido como el de Villamanta, que va hasta el de Peralejos para desembocar finalmente en el de “Alverche”, que pasa junto a “Aldea del Frexno” y es caudaloso.
A la pregunta XXIII, sobre las fuentes de agua y el lugar donde se muele, la respuesta fue que en el arroyo Grande hay fuentes y manantiales, que hay muchos. Y en cuanto a moler, se va hasta los molinos existentes en el río Alberche y en el arroyo de Peralejos.
A la pregunta XXIV, sobre los pastos, dehesas, bosques y cotos de caza y pesca existentes en el pueblo, la respuesta fue que hay una dehesa boyal13 llamada Navatoconosa y un ejido14, no existiendo ni bosques ni caza.
A la pregunta XXV, sobre las encomiendas, cortijos y haciendas del lugar, la respuesta fue que sólo hay algunos cortijos y haciendas, pero de poco valor, por lo que no quedan registradas.
A la pregunta XXVI, sobre si la tierra es de labranza y los cultivos que en ella hay, los ganados que se crían, lo que valen los diezmos15 y los demás bastimentos16 que más falta hacen y de dónde se traen, las respuestas fueron que la tierra sí es de labranza y se cultiva trigo y cebada, además de tener buenas viñas; no hay mucho ganado, componiéndose ste de ovino, cabrío y vacuno; en cuanto a los diezmos, “e que se suelen arrendar los diezmos de los panes en çiento e çiento quarenta cahízes17 de pan y en los medios de esto”; sobre los artículos faltantes, falta de todo por ser la población pobre.
A la pregunta XXXII, sobre la ubicación del poblado y las posibles cercas o murallas, la respuesta fue que está situado en un valle, teniendo al Sur una gran vega, amplia y llana.
A la pregunta XXXV, sobre el tipo de casas y el material de que están construidas, la respuesta fue que son casas bajas, de labradores, hechas con tapial18 y madera de la sierra, así como el resto de materiales que haya en el término.
A la pregunta XXXVI, sobre los edificios más señalados y los restos de antiguas construcciones, la respuesta fue que hubo muchas edificaciones, actualmente enterradas y cuyos restos aparecen al labrar la tierra. Se han hallado enterramientos, construidos con pilas de piedras blancas, piedras de las sierra y lanchas de piedra, en los que había huesos de hombres de “mayor marca” que los actuales. También se han encontrado varios epígrafes19, entre los que se cita una piedra berroqueña20 situada en la esquina de la casa del cura de Casarrubios, junto a la iglesia de este lugar, con la siguiente inscripción en letras góticas:
L. AESYMACHO
QVIRINA ANNO
RUM. LXXXX. S.T.
.T.L. AELIAE. PON
PEI VCSORI
AR. XXX./. //
Otra, definida como “tosca y no bien labrada”, situada en la casa del mesón de Juan de Martín Sánchez, en la plaza del pueblo, con la siguiente inscripción, igualmente en letra gótica y con una estrella pintada sobre ella:
APLONDVS. DA.
GENCIVM. M.F.
ANORVM. XX.
H.S. EST.
Otra, berroqueña, tosca y con forma de pilar de cuatro esquinas, en la que se lee:
LAB LARIBVS SACRVMVALE VS SCVNDVS. (obsérvese que LAB está tachado).
Y una piedra tosca, no bien labrada, con una estrella sobre ella y una guirnalda alrededor, utilizada como cimiento de una casa, donde se puede leer:
AN MIL. IE
STE. VRSV
LI. AV. XlV.
S.T.T.L.
Se menciona la existencia de otras piedras, pero ya ilegibles, así como la de monedas antiguas, algunas de los emperadores Galieno y Julio César.
A la pregunta XXXVIII, sobre los personajes destacados del lugar, la respuesta fue que San Dámaso, papa entre el 366 y el 384, nació aquí, como así lo atestigua el cronista Esquivel.
A la pregunta XXXIX, sobre el número de vecinos que el pueblo tiene entonces, la respuesta fue que hay 250 vecinos de los más de 300 que ha habido antes. De su disminución, culpan a muertes ocasionadas por enfermedad, especialmente en el año 1557.
A la pregunta XL, sobre si todos los vecinos son labradores o si hay hidalgos21, la respuesta fue que no hay hidalgos, siendo labradores todos los vecinos.
A la pregunta XLII, sobre si los habitantes son ricos o pobres y de qué viven, la respuesta fue que todos son labradores, viven de ello y de las viñas, siendo en su mayoría pobres.
A la pregunta XLIII, sobre la justicia eclesiástica existente en la población, la respuesta fue que no hay juez eclesiástico en el pueblo, dependiendo de la justicia eclesiástica del arzobispo de Toledo.
A la pregunta XLIV, sobre los regidores que había en el pueblo, la respuesta fue que hay dos alcaldes ordinarios22, dos regidores, dos alcaldes de hermandad23, dos alguaciles y dos cuadrilleros24.
A la pregunta XLV, sobre los términos que tiene el lugar y las rentas que tiene por propios y lo que valen, la respuesta fue que no tiene términos propios por ser aldea de la villa de Casarrubios; en cuanto a lo que valen los propios y las rentas del concejo, consistentes en las hierbas que venden de la dehesa y las tierras del concejo, son unos veinticinco mil maravedís al año.
A la pregunta XLVII, sobre, si el pueblo es de señorío, saber si la jurisdicción es del señor o no, y las rentas y privilegios de dichos señores, la respuesta fue que la jurisdicción civil y criminal es del señor de Casarrubios, perteneciéndole a él las alcabalas26, la martiniega27 –cuatro maravedís y medio cada vecino por año– y la moneda forera28 –quince maravedís y medio cada vecino cada siete años–.
A la pregunta XLVIII, sobre las parroquias y ermitas existentes en el pueblo, la respuesta fue que está la iglesia de Santa Catalina y las ermitas de Nuestra Señora del Socorro, en el camino hacia Aldea del Fresno; la de San Sebastián, en el camino de Casarrubios; y la de San Bartolomé, en el camino a Perales.
A la pregunta L, sobre los arciprestazgos, beneficios curados (comportaban la cura de almas) y simples (sin obligación de cura de almas), anejos y préstamos, lo que tuvieran las iglesias y su valor, la respuesta fue que la iglesia del lugar es aneja29 de la de Casarrubios, por lo que allí se declarará su valor.
A la pregunta LII, sobre las fiestas de guardar, los días de ayuno, de no comer carne, las que en el pueblo se guardasen por voto particular, además de las de la Iglesia, y las causas y principios de ella, la respuesta fue que se guardan los días de San Sebastián, de Santa Catalina y de San Pantaleón por devoción y voto, y, en el caso de Santa Catalina, por ser la titular de la iglesia. Asimismo, todos los días de vísperas de los días de Nuestra Señora, San Sebastián y Santa Catalina, no se come carne por devoción.
A la pregunta LIV, sobre los hospitales del lugar, sus rentas y su valor, la respuesta fue que hay un hospital pobre y sin rentas, disponiendo sólo de las limosnas. Se encuentra en la casa que para este fin dejó el vecino Bartolomé Hernández. Además, hay sendas memorias, del clérigo Sebastián Sánchez y de Catalina Hernández, que dejaron su hacienda y unas tierras, respectivamente, para que con sus rentas se repartan a los pobres cada año. También hay cuatro cabildos y cofradías, siendo uno el del Santísimo Sacramento, otro, el de la Asunción de Nuestra Señora, y un tercero, el de San Sebastián. No aparece el nombre del cuarto cabildo.
A la pregunta LV, sobre si el pueblo es lugar de paso y las rentas que ello produce, la respuesta fue que por su término pasa la cañada por donde circula el ganado, tanto cuando va a las sierras como cuando vuelve de ellas.
Dejamos las Relaciones de Felipe II y nos vamos al año 1591 para consultar el Censo de la Corona de Castilla. En él, Villamanta, ya con este nombre, pertenece a la provincia de Madrid y tiene una población de 319 vecinos, de los que 315 son pecheros, uno, hidalgo, y tres, clérigos.
Finalmente, es de interés señalar que, en 1599, el señorío de Casarrubios fue elevado a la dignidad de condado en la persona de don Gonzalo Chacón y Ayala, I conde de Casarrubios.
Villamanta, Portada del siglo XVII, año de 1699, de la casa solariega y blasonada de la Calle José García Núñez, 7.
En este siglo, se sucede una serie de pleitos, algunos de los cuales no son sino la continuación de los empezados en el siglo anterior. Veamos cómo, poco a poco, Villamanta fue obteniendo diferentes privilegios hasta obtener el privilegio de villa, segregándose de la de Casarrubios.
En 1606, por una real ejecutoria, se resuelve el contencioso mantenido con la Mesta30 por arar en la dehesa del ejido, autorizándose a ello y sentenciando la restitución de lo que, por esto, se les hubiera quitado a los vecinos.
En 1616, tras el pago de 50.000 maravedíes, el rey Felipe III (1598 – 1621) concede a Villamanta el privilegio de mojonería31, almotacén32 y fiel medidor33, una decisión que ocasionó que el administrador de Millones34 de Casarrubios embargara a Villamanta los derechos de mojonero y fiel medidor, alegando que son del rey y que este último derecho no figuraba en el documento de venta. El pleito ocasionado no se resolvería hasta el año 1696 en favor de Villamanta.
En 1619, otra ejecutoria de la chancillería de Valladolid autoriza a Villamanta al aprovechamiento del bien propio de la dehesa de Navatoconosa, pudiendo vender su caza y su hierba de manera exclusiva, sin que ninguna otra persona o entidad pueda beneficiarse de ello.
En este siglo, Villamanta ha intentado separarse de la jurisdicción de la villa de Casarrubios solicitándoselo al rey, al que le ofreció pagar por el privilegio de villazgo. Argumentaba que la distancia de dos leguas hasta esta villa era a través de malos caminos y arroyos de cierta peligrosidad, lo que le ocasionaba una serie de daños cuando algún pleito les obligaba a desplazarse hasta ella. A este motivo, se añadía la situación particular del lugar, con grandes superficies de cultivo sin arar, dada la disminución de población que habían ocasionado las diferentes epidemias.
En 1625, Felipe IV (1621 – 1665) autoriza la concesión de dicho privilegio a Villamanta, a cambio del pago de 10.000 maravedíes por cada vecino, lo que sumaba un total de 610.000 maravedíes, al incluirse entre los pagadores a las viudas, los niños y los clérigos.
El 2 de noviembre de 1625, obtiene Villamanta el privilegio de villazgo, con jurisdicción civil, criminal, alta, baja, mero35 y mixto36 imperio. A la par, se deslindó este término de los de Casarrubios, Méntrida, Aldea del Fresno, Villamantilla, Perales de Milla y Valmojado.
Por entonces, según alguna de nuestras fuentes, la población de Villamanta era de 137 vecinos, 15 viudas, 30 menores y tres clérigos. Una cifra que no cuadra con la que debería ser la resultante del anterior pago por el privilegio de villazgo ya que 610.000 entre 10.000 nos da 61 vecinos.
En 1626, en la escritura de concordia entre el conde de Casarrubios, don Gonzalo Chacón, y la nueva villa, se estableció, en cuanto a su gobierno, que el Ayuntamiento elegiría a cuatro personas para alcalde y otras cuatro para regidores para que, de entre cada grupo de cuatro, el conde nombrara a dos para cada cargo.
En 1629, la villa se separa del condado de Casarrubios y pasa a formar parte del condado de Miranda. Según la fecha a consultar, es en este mismo año cuando obtuvo el privilegio de villazgo. Sea una fecha u otra, sí es alrededor de éstas cuando Villamanta pasa a formar parte de dicho condado.
En 1644, la villa consigue, a cambio de 1.200 ducados37, que se reconozca el privilegio de behetría38, por el que todos los vecinos, hidalgos o no, eran iguales ante la ley.
Dos años después, según la obra “Vecindarios de la Corona de Castilla y Reinos de Navarra, Aragón y Valencia”, de 1646, la población de Villamanta, con el nombre de Billamanta, era de 76 vecinos.
En 1684, Villamanta, a cambio de un sueldo de 33.000 maravedíes y dos casas –una como vivienda y otra como consulta–, contrata los servicios de un médico que residiera en la localidad.
En 1689, logra la villa otra autorización, en este caso, la de recoger leña, a cambio del pago de 12 maravedíes por carga, en las dehesas del Rincón, Villanueva de Tozar y Hernán Vicente.
El siglo XVIII lo comenzamos con el Censo de Campoflorido39, de 1712. En él, Billamanta (sic) tiene una población de 54 vecinos. Por aquellas fechas, continuaba formando parte del marquesado de Miranda.
En 1752, conforme a las Respuestas al Catastro del Marqués de la Ensenada40, Billamanta tiene una población de 86 vecinos –unos 325 habitantes41–, además de dos clérigos. De ellos, 77, son pecheros; cinco, transeúntes –de los que uno es noble y cuatro son pecheros–; tres, viudas con bienes; y un pobre. Por oficios, las cifras son de 74 labradores, 25 jornaleros, un albañil, un zapatero y un herrero.
La cabaña ganadera de entonces contabilizaba 146 cabezas de ganado bovino, 13 de caballar, 20 de mular, 60 de asnal, 900 de ovino, 135 de caprino y 344 de porcino.
Llegamos a las Descripciones del Cardenal Lorenzana42, de 1784; en particular, a las que tratan de todos los lugares del Arzobispado de Toledo. Aquí, Villamanta, que aparece ya el con nombre escrito así, es una villa de señorío de sesenta vecinos. Cuenta con la iglesia de Santa Catalina Mártir, aneja a la Parroquial de Casarrubios del Monte.
En estas descripciones, se vuelve a tratar de su posible origen como Mantua Carpetana, pero sólo para afirmar que no hay documentos que lo atestigüen, aunque sí que, a una media legua de distancia, existen tierras de labor en las que se encuentran restos de tejas y ladrillos muy antiguos.
Villamanta limita al Este, a una legua larga, con Navalcarnero; al Sur, a dos leguas, con Valmojado; y al Oeste, a dos leguas, con Méntrida. Su jurisdicción se extiende dos leguas de Norte a Sur y una legua al Oeste.
Tiene poco más de una fanega43 de álamos negros y otras dos mil, dispersas, de encinas y olivares; unas ocho mil fanegas de cultivo de todo tipo de granos, doscientas arrobas48 de aceite y ocho mil de vino.
En cuanto a las enfermedades más frecuentes en el pueblo, éstas son las fiebres tercianas49, achacables, según esta fuente, a las “mareas del arroyo”, leyendo, además, que “[…] las que suelen declinar en dolores de costado, y en otras enfermedades de consideración, las que hacen juzgar que el Pueblo es enfermo, como se deduce más claramente del pasado año de mil setecientos ochenta y uno en que nacieron quince y fallecieron treinta y cuatro [...]”.
Unos años después, en 1787, tenemos el Censo de Floridablanca50 –en donde Villamanta aparece con el nombre Villa manta–. El pueblo se cita como una villa perteneciente al señorío secular de don Joaquín Thomás de Lara, dentro de la intendencia de Madrid, dotada de juez ordinario de señorío. Contaba en aquellos años con una población total de 250 habitantes, 129 varones y 121 mujeres. Esta población cuenta con un cura, un beneficiado51, un sacristán, dos acólitos52, 19 labradores, 36 jornaleros, seis artesanos, 23 criados y 160 menores sin profesión.
Llegamos al siglo XIX y comenzamos nuestro resumen de este siglo con el Recuento de Antonio Regàs53, realizado entre los años 1824 y 1825, en el que Villamanta tiene una población de 62 vecinos y forma parte de la provincia de Madrid. Recordemos que unos años antes, entre 1808 y 1814, se había librado frente al invasor napoleónico la Guerra de Independencia española que dejó destrozado el país.
Siguiendo con el tomo XIII de “Arquitectura y Desarrollo Urbano. Comunidad de Madrid (zona Sur)”, en su página 507, vemos que, conforme al censo de 1810, Villamanta ha visto descender su población hasta los 264 habitantes como consecuencia a una epidemia de paludismo.
Continuamos con el Diccionario Geográfico-Estadístico de España y Portugal que, entre 1826 y 1829, confeccionó Sebastián Miñano54. Por entonces, Villamanta es una villa de señorío perteneciente a la provincia y el partido de Madrid, y al arzobispado de Toledo, dotada de alcalde ordinario. Tiene 84 vecinos, 326 habitantes, y cuenta con una parroquia, dos hospitales y un pósito56. El término cuenta con montes de encina y viñedo, además de algunas tierras de cultivo “[...] muchas de ellas yermas57 por su mala calidad”.
Miñano menciona “[...] la poca salubridad del pueblo, singularm. á fines de estío [...]” y como ésta se atribuye al arroyo que pasa por sus inmediaciones. Igualmente, leemos aquí que “En sus inmediac. se hallan monedas antiquísimas y se ven muchas ruinas”.
Antes de continuar con la siguiente obra, debemos mencionar cómo durante estos años se sucedió una serie de reformas de especial interés, como la desaparición definitiva de los señoríos, en 1837, por lo que Villamanta deja de ser una villa “de señorío”.
Continuamos con el Diccionario geográfico-estadístico-histórico de España y sus posesiones de Ultramar (1846-1850), de Pascual Madoz. Villamanta es una villa con ayuntamiento perteneciente a la provincia y audiencia territorial de Madrid, dentro del partido judicial de Navalcarnero, a la capitanía general de Castilla la Nueva y a la diócesis de Toledo. La población, entonces, es de 65 vecinos, 285 habitantes.
Aquí, se vuelve a mencionar las fiebres tercianas como la enfermedad más común.
El pueblo posee 70 casas, denominadas “inferiores” por Madoz; un ayuntamiento con cárcel; un gran edificio en malas condiciones que, anteriormente, fue pósito y tercia58; una escuela de instrucción primaria, común para niños y niñas; la ermita de Nuestra Señora del Socorro; y iglesia parroquial de Santa Catalina. Vemos así que la iglesia de Villamanta ya ha dejado de ser aneja a la de Casarrubios. El agua potable la obtienen los vecinos de una existente en el pueblo y de varias otras que hay por el municipio.
El término posee, según Madoz, extensos montes muy poblados, varias huertas, bastantes viñas y algunos olivares. Si para Miñano sus tierras estaban yermas por su mala calidad, para Madoz “[...] el terreno es de buena calidad, especialmente para plantíos”.
La producción agrícola es de trigo, cebada, centeno, algarrobas, avena, patatas, vino, aceite, todo tipo de legumbres, hortalizas y algunas frutas. La cabaña ganadera consta de ganado vacuno, mular, caballar y de cerda. En el término, hay cría de caza de liebres, conejos y perdices, además de muchos lobos y zorros, así como algunos corzos, gamos, jabalíes y venados.
El correo se recibe en su estafeta, de la administración de Navalcarnero, por medio del conductor de la hijuela59 de San Martín de Valdeiglesias.
En 1865, Cayetano Rosell y López60 publica su “Crónica de la Provincia de Madrid”, en donde Villamanta, con 327 habitantes, tiene extensos y poblados montes, algunas huertas, bastantes viñedos y algunos olivares. Hay caza menor y mayor. Cuenta con la iglesia parroquial de Santa Catalina y con la ermita de Nuestra Señora del Socorro.
Terminamos la revisión de las obras de este siglo con la “Guía de Madrid y su provincia” (tomo II), publicada por Andrés Marín Pérez61 entre 1888 y 1889. El autor comienza describiendo el término calificando a los montes de pequeños y regularmente poblados. Alaba la calidad de su agua potable, tanto para uso personal como para riego.
Sobre la historia del pueblo, Marín vuelve a mencionar la posibilidad de que Villamanta sea la antigua Mantua Carpetana, basándose para ello en las Relaciones de Felipe II –ya tratadas anteriormente en esta página, tanto en la Introducción como en el apartado del siglo XVI–. No obstante, Marín también cita la posibilidad esgrimida por otros autores de que Mantua fuera Madrid, dejando que el transcurso del tiempo descubra la realidad de tales afirmaciones.
Por entonces, Villamanta tiene 128 vecinos y 422 habitantes que viven en las 120 casas “de rústica construcción” con que cuenta el pueblo. Igualmente, leemos cómo la villa tiene los coches diarios de Méntrida y Cadalso, que la comunican, por un precio de “cuando más 4 pesetas” el asiento, con Navalcarnero y Madrid.
Siguen existiendo la iglesia parroquial de Santa Catalina y la ermita de Nuestra Señora del Socorro, disponiéndose de una casa rectoral “de buenas condiciones y alguna comodidad”. En cuanto a cofradías, sólo hay una, la de las Ánimas, en la que la mayoría de los vecinos –“casi todos”– son cofrades.
Sólo hay una escuela incompleta62 para ambos sexos y un único profesor. Dispone de 600 pesetas como sueldo anual, 125 por retribuciones, 200 para material y una casa-habitación. A ella, asiste un total de 20 alumnos que son educados por el método simultáneo63. En invierno, además, hay clases nocturnas para adultos por las que el pueblo le paga otras 100 pesetas.
Hay un único médico para atender a la población; a las 22 familias pobres, las atiende por 995 pesetas pagadas por el Ayuntamiento, mientras que a las pudientes lo hace mediante distintas igualas64, según su economía y el número de miembros de la familia. No cuenta con farmacia, debiendo obtener los medicamentos, mediante pago inmediato, de las farmacias de Navalcarnero. Tampoco tiene veterinario, encargándose el de Navalcarnero de atender a los animales a cambio de pago, igualmente inmediato, o conforme a acuerdos suscritos con algunos vecinos.
El Ayuntamiento tiene seis concejales, igual número de miembros que los vocales que tiene la Junta Municipal. Dispone de un juzgado municipal, dependiente del de instrucción de Navalcarnero, así como de una cárcel municipal, situada en la planta baja del Ayuntamiento.
En el pueblo, hay dos posadas, que cobran 2,50 pesetas a cambio de “un buen dormitorio y reducida comida”.
El término municipal mide 6.357 hectáreas65 (ha), 3 áreas (a) y 12 m2. Las paníferas ocupan 4.565 ha, 30 a y 82 m2; las viñas, 740 ha, 54 a y 65 m2; los olivares, 30 ha, 18 a y 78 m2; y las huertas, 34 ha, 12 a y 16 m2; mientras que los montes se extienden por 780 ha, 46 a y 19 m2.
La cabaña ganadera se compone de 44 cabezas de ganado mular, 43 de vacuno y 50 de asnal para labor, y 400 de lanar y 12 de cerda para reproducción.
La producción industrial se reduce a la fabricación de harinas; la elaboración de pan, vino y aceite; la conserva de carnes y la “transformación de algunos otros productos naturales”.
El comercio se basa en la venta de carnes, granos, lana, leche, etc., y la compra de telas, productos ultramarinos y los que se necesiten en el pueblo.
El correo se recibe diariamente por un valijero66 y se envía de igual forma.
La evolución de la población de Villamanta entre 1842 y 1900 fue la siguiente: en 1842, tenía 285 habitantes de derecho67 y 65 hogares; en 1857, 327 de hecho y 84 hogares; en 1860, 324 de hecho y 92 hogares; en 1877, 436 de hecho, 409 de derecho y 118 hogares; en 1887, 431, 391 y 137, respectivamente; en 1897, 593 de hecho, 529 de derecho y 167 hogares; y en 1900, 552, 542 y 151, en idéntico orden.
Iniciamos el siglo XX con los censos correspondientes a su primera mitad. En 1910, la población era de 730 habitantes de hecho, 722 de derecho y 177 hogares. Unas cifras que representan, respectivamente, un aumento del 32,25%, 33,21% y 17,22% conforme a los datos de 1900.
En 1920, las cifras son de 743 habitantes de hecho, 764 de derecho y 181 hogares; en 1930, de 894, 891 y 210, respectivamente; en 1940, de 825, 816 y 187, en igual orden. Recordemos que entre 1936 y 1939 se libro la Guerra Civil Española, lo que puede explicar estas disminuciones entre 1930 y 1940 del 7,72%, 8,42% y 10,95%. En 1950, conforme a los datos de su censo –821 habitantes de hecho, 824 de derecho y 212 hogares–, la población prácticamente está estancada.
Antes de continuar, veamos estos años con un poco más de detalles. Para ello, comenzamos con el libro de “Historia de Madrid y de los pueblos de su provincia”, publicado en 1921 por Juan Ortega Rubio68, en donde obtenemos que, para entonces, Villamanta cuenta ya con una estación de la línea de ferrocarril que une Madrid con Villa del Prado. Su población en ese momento es de 730 habitantes de hecho y 732 de derecho, una cifra que podría corresponder al censo de 1910, si no fuera por el dígito central de los habitantes de derecho. ¿Un error o son diferentes censos?
Ortega menciona la existencia de la “espaciosa” iglesia de Santa Catalina, cuya construcción sitúa en el siglo XVI; de la ermita de Nuestra Señora del Socorro, exponiendo la gran devoción que en el pueblo se tiene a su titular; del pequeño hospital y de la existencia de dos escuelas unitarias69, una para niños y otra para niñas. Igualmente, habla de la elegancia de la Casa del Ayuntamiento.
De su agricultura, tras decir que tiene tierras de pan llevar70 y grandes viñedos, cuenta cómo se cultiva a gran escala el tomate y el pimiento. Sobre la ganadería, expresa la existencia de grandes montes, en los que se cría algo de caza y todo tipo de ganado.
Sin embargo, a pesar de la previsible obtención y venta de productos agropecuarios (pan, vino, harinas, carnes…), no hace ninguna mención a la industria y al comercio de la localidad.
En 1958, se publicó la segunda edición de la “Guía de la provincia de Madrid”, de Antonio Cantó Tellez. En ella, el autor le asigna una población a Villamanta de 824 habitantes, es decir, la misma cifra de población de derecho en el censo de 1950. Cantó resalta la importancia del pimiento y el tomate en el mercado de la capital española, habiendo llegado a veces a provocar la oscilación de los precios de estos productos.
Sobre la iglesia parroquial de Santa Catalina, la describe como un templo del siglo XVI con tres naves de arcos grecorromanos71 que tiene, como interesantes, un altar churrigueresco72 y un Nazareno de la escuela vallisoletana. Exteriormente, la iglesia dispone de un atrio73 en el que se han plantado acacias. Cita, asimismo, la existencia, junto a la carretera, de la ermita de Nuestra Señora del Socorro, de la que no da ningún otro detalle.
Otras menciones son la existencia de la estación de ferrocarril en la línea Madrid-Almorox, del coche de línea74 y la presencia de médico en el pueblo.
Veamos, ahora, el contenido sobre la localidad del tomo 17 del “Diccionario Geográfico de España”, de 1961. Villamanta es un municipio y villa de Madrid dependiente del partido judicial de Navalcarnero; tiene 824 habitantes, de los que 128 son labradores. Cuenta, en compacto75, con 196 viviendas y 40 edificios de otros uso, y en diseminado76, con cinco viviendas y seis edificaciones de otros uso. Además, posee cuatro escuelas, dos para niños y dos para niñas, y tiene médico, farmacia y veterinario.
El agua para beber procede del arroyo Grande y “está conducida a las casas”. Dispone, igualmente, de varias fuentes repartidas por el núcleo urbano.
El territorio, además de pastos, tiene 500 ha de bosques de encina y chopos. En cuanto a su fauna, ésta se compone de perdices, conejos y palomas, no haciéndose ninguna mención a la existencia de caza mayor citada por Rosell en 1865 o la presencia de corzos, gamos, jabalíes y venados que vimos en la obra de Madoz de entre 1846 y 1850.
Sobre la agricultura, es un poco más detallado este diccionario, al mencionar cómo las tierras de cultivo son arenosas y tienen la propiedad repartida, existiendo colonos77 y aparceros78. Hay 70 ha de regadío, en las se cultivan judías, repollos y tomates. El agua de riego procede de pozos desde los que se extrae mediante norias. Las tierras de secano suman 3.500 ha que se cultivan cada tres años, alternando el producto a sembrar. Los olivos se extienden por 1.000 ha de terreno, mientras que los viñedos lo hacen por otras 800 ha. Mayoritariamente, para las labores agrícolas, se siguen utilizando animales de labor, aunque hay un comienzo incipiente de mecanización, con la presencia de cinco tractores en el pueblo.
La agricultura suma 62 cabezas de ganado mular, siete de caballar, 97 de vacuno, 49 de asnal, 80 de cerda, 5.000 de lanar y 150 de cabrío, además de 2.000 gallinas –en el pueblo, hay dos granjas avícolas– y 50 colmenas.
La industria queda representada por la presencia de un molino y dos tahonas (panaderías). En cuanto al comercial, éste se compone de tres tiendas de ultramarinos, una de tejidos, tres lecherías, tres tabernas y un cine.
El sector de comunicaciones cuenta con la estación de ferrocarril en la línea Madrid-Almorox, además de la existencia en la localidad de dos camiones, un automóvil, doce motocicletas, 25 carros y 70 bicicletas. El pueblo también dispone de cartería y central telefónica.
Desde entonces, entre otras actuaciones urbanísticas, se ha construido una escuela municipal y un polideportivo, y se han remodelado la Plaza de Juan Carlos I, el antiguo edificio de las escuelas, el acceso hasta la Ermita de Nuestra Señora del Socorro y el centro de salud.
En esta segunda mitad del siglo XX, la población no se vio tan afectada, como en otras localidades españolas, por la masiva emigración del campo a la ciudad habida durante las décadas de los años 50, 60, 70 y 80 del pasado siglo XX. Así, en 1960, tenía 1.012 habitantes de hecho, 1.042 de derecho y 248 hogares; en 1970, 1.013, 1.014 y 247, respectivamente; en 1981, 927 habitantes de hecho, 959 de derecho y 268 hogares; en 1991, 1.185, 1.205 y 354, en igual orden; y en el año 2000, 1.571 habitantes de derecho.
Terminamos este resumen histórico consultando los datos procedentes del Instituto de Estadística de la Comunidad de Madrid, donde obtenemos que, en 2020, el PIB per cápita de Villamanta fue de 15.045€, inferior al de la zona, de 18.295€, y al de la Comunidad de Madrid, de 32.385€. Por sectores, éste se divide en un 20,56% procedente de la construcción; un 18,91%, de los servicios a empresas y financieros; un 12,68%, de los servicios de distribución y hostelería; un 6,35%, de la agricultura y ganadería; un 6,25%, de la minería, industria y energía; y un 35,25%, de otros servicios.
Evidentemente, el sector agropecuario ya no es el motor económico de Villamanta.
Según este mismo enlace, el Indicador de Renta Disponible Bruta Municipal per cápita en 2021 es de 13.812€, inferior al zonal, de 16.289€, y al de la Comunidad, de 20.471€.
En lo que lleva trascurrido de este siglo, la población de Villamanta ha continuado aumentando. Así, en 2001, la población de derecho era de 1.846 (ya no se contabiliza más la población de hecho) y 605 hogares; en 2011, de 2.473 y 875, respectivamente; y en 2021, de 2.648 habitantes de derecho y 915 hogares.
Recorramos, a continuación, algunos de los principales monumentos y lugares de interés de Villamanta.
Monumentos y puntos de interés
La Iglesia Parroquial de Santa Catalina, situada en el extremo Nordeste del casco urbano, se comenzó a construir –se cree que sobre otro templo anterior– en el siglo XVI y se terminó en el XVII. El templo tiene planta rectangular, cabecera poligonal y se cubre con un tejado a varias aguas81.
Levantada con muros de ladrillo y cajones de mampostería82, en su interior, tiene tres naves separadas entre sí por arcos de medio punto84 de piedra apoyados sobre columnas de idéntico material con capiteles85 lisos. La capilla mayor, de forma ochavada86, se encuentra delimitada por un arco triunfal apuntado87. Anteriormente, presentaba una cubierta abovedada, bajo la que se descubrió un artesonado durante una de la restauraciones del templo. El resto del edificio se cubre con una armadura de madera.
En la cabecera de la iglesia, en el lado de la Epístola88, se encuentra la torre, mientras que a los pies hay un coro alto, de construcción reciente, que sustituye al anterior, demolido durante la intervención de 1976. En el lado del Evangelio, también de la cabecera, tenemos la Capilla del Santo Cristo de la Fe y Ánimas, cuya imagen es de época barroca. En la nave de este mismo lateral, se encuentra la Capilla de Nuestro Padre Jesús Nazareno del Buen Silencio, con una imagen del Nazareno atribuida al taller de Gregorio Fernández.
Otros elementos de interés del templo son: un cuadro del siglo XVI, atribuido a Hendrick de Clerck, pintor flamenco fallecido en 1630, que representa a la Sagrada Familia con Santa Ana y San Joaquín; las tallas de San Blas y de Nuestra Señora de los Dolores, del siglo XVIII; y la de Santa Catalina (titular de la iglesia), con origen en los talleres de Olot.
Mención aparte merece la cripta del papa San Dámaso, situada bajo el Altar Mayor. En ella, se encuentra la figura del Santo Padre yacente con las manos abrazadas al relicario que contiene su reliquia ósea, siendo ésta la única de un Papa existente en la Comunidad de Madrid. Este Santo Padre nació en el año 304 y murió en Roma en 384. Sobre su lugar de nacimiento, hay distintas opiniones entre los que afirman que fue en Egitania (Portugal) y en Villamanta (Madrid). Lo que sí es cierto es que la única declaración escrita sobre su lugar de nacimiento es la realizada por el cronista de Carlos I, Pedro de Esquivel, quien afirma que éste fue Villamanta.
El acceso al interior de la iglesia se realiza por dos entradas: una, situada a los pies, y otra, en el lateral de la Epístola (lado Sur). El acceso de los pies, de ladrillo, es un hueco90 adintelado91 y rematado por un arco de medio punto cuya entrada está protegida por un pórtico sobre pilastras con arcos de medio punto y rematado por un tejado a tres aguas. La entrada del lateral de la Epístola, en cambio, es un arco de medio punto con dovelas93 de piedra. Este templo no cuenta con demasiados vanos de iluminación, destacando los tres óculos94 existentes a sus pies.
Exteriormente, sobresalen los contrafuertes de ladrillo, especialmente, por su visibilidad, los del ábside, los de los pies y el del lado de la Epístola –a la derecha de la entrada–.
La torre es planta cuadrada y a ella se accede, desde el exterior, a través de una pronunciada escalera junto al ábside. Se estructura en tres cuerpos: uno, inferior, de mampostería, con una pequeña ventana en el lado Sur; un segundo, con aparejo95 a la toledana –esto es, de cajones de mampostería con verdugadas96 de ladrillo y refuerzos de este último material en las esquinas– y una ventana con arco de medio punto también situada en el lateral Sur; y el cuerpo de campanas, con cuatro huecoss de medio punto destinados a las campanas y una cornisa97 de ladrillo sobre la que se extiende el tejado a cuatro aguas. Su situación –en la cabecera del templo, en lugar de en los pies, como suele ser habitual– tiene que ver, según algunas fuentes, con el pasado romano de Villamanta; y es que la base de mampostería de la torre podría proceder de una anterior construcción de origen romano.
La iglesia se encuentra exenta108 y rodeada por un espacioso atrio cuyo perímetro se halla delimitado por un muro de mampostería y ladrillo rematado por una albardilla109 de piedra. Sobre ésta, espaciadas, se levantan las típicas bolas de piedra escurialenses110 apoyadas sobre basas también de piedra. El acceso a él se realiza por sendas entradas, situadas, respectivamente, al Sudoeste y Sudeste del templo.
Como podemos leer en la página 527 del tomo XIII “Arquitectura y Desarrollo Urbano. Comunidad de Madrid (zona Sur)”, se desconoce quién fue el maestro responsable de su diseño y construcción. Lo que sí se sabe, conforme al testamento del maestro cantero Juan Francés (redactado en 1550), es que, por entonces, se encontraba trabajando en las iglesias de Villamanta, Getafe y Navalagamella, por lo que puede haber sido el director de la obra, así como de sus planos.
A lo largo de su historia, ha tenido diversas intervenciones de restauración, pudiendo citarse las llevadas a cabo en el siglo XX, en las que, primero, fue reconstruido en 1955, y luego, restaurado en 1997. Sí hubo una acción –desconocemos si fue en alguna de estas dos intervenciones o en otra anterior– de carácter desafortunado ya que la madera del órgano se utilizó para hacer bancos de madera, a la par que se vendieron sus tubos.
En la reconstrucción de 1955, a cargo del arquitecto don Germán Valentín-Gamazo, se derribó la anterior casa parroquial, situada a los pies del templo, para construir una nueva en la cabecera, junto al ábside y la torre.
En 1976, tras un incendio que destruyó la zona central de templo, se demolió el coro, se quitó el cancel de madera original y se reformó la torre, cubriéndola con teja plana en lugar de curva.
En la reforma de 1997, destinada a consolidar muros, contrafuertes y cimentación, se realizaron, entre otras acciones, la recuperación de la escalera exterior de la torre, a la vez que se construía otra interior, y se volvía a instalar un coro alto con estructura de madera.
La iglesia parroquial de Santa Catalina tiene incoado expediente de declaración de Bien de Interés Cultural, en la categoría de Monumento, con fecha 5 de abril de 1983.
Además, está incluida, con protección integral, en el Catálogo de Bienes Protegidos del Ayuntamiento de Villamanta.
Localización: Plaza de la Constitución. 28610 Villamanta.
En el lateral Sur del atrio de la anterior iglesia parroquial de Santa Catalina, se encuentra un Crucero de granito del año 1641. Está formado por cuatro gradas, de las que se eleva un pedestal cuadrangular, sobre el que se haya situada la columna que sostiene la cruz. Esta columna consta de basa y capiteles toscanos111, y fuste octogonal con una ligera éntasis112. En la sencilla cruz, sólo destacan las bolas en las que finalizan los tres extremos de ella.
El crucero forma parte del mismo expediente por el que la iglesia parroquial de Santa Catalina tiene incoada la declaración de Bien de Interés Cultural, en la categoría de Monumento, con fecha 5 de abril de 1983.
Al igual que la iglesia, el crucero también está incluido, con protección integral, en el Catálogo de Bienes Protegidos del Ayuntamiento de Villamanta.
Localización: Plaza de la Constitución. 28610 Villamanta.
La Ermita de Nuestra Señora del Socorro, el otro templo existente en Villamanta y de fecha de construcción desconocida, se encuentra en el límite Oeste del núcleo de población, casi en el extremo opuesto de la iglesia de Santa Catalina. La ermita aparece nombrada ya en el siglo XVI, en las Relaciones Topográficas de Felipe II, al igual que las otras dos ermitas, actualmente desaparecidas, de San Sebastián y San Bartolomé.
El edificio es de planta rectangular, tiene una sola nave y sus muros, también de aparejo a la toledana (mampostería y verdugadas de ladrillo), están levantados sobre un zócalo de mampostería, quedando cubierto por un tejado a cuatro aguas. Cuenta con un pórtico cerrado con rejas y cubierto por un tejado a tres aguas sustentado por cinco arcos de medio punto sobre pilastras, todo ello de ladrillo. Los arcos se reparten entre los tres situados a la entrada, con el central mayor, y los otros dos dispuestos uno a cada lado.
Como huecos de iluminación, sólo cuenta con la entrada acristalada y las ventanas adinteladas de piedra de ambos laterales. Aquí, debemos hacer un inciso ya que, anexo por su lateral Norte, hay un segundo cuerpo rectangular, de menor altura y tejado a tres aguas, en el que vemos, junto a una puerta adintelada, la que pensamos que podría ser la ventana del otro lateral de la ermita, actualmente cubierto, en gran parte por este otro. Este segundo cuerpo no aparece en nuestras fuentes y creemos que debe de ser de construcción bastante reciente ya que, consultando la web Nomecalles, es en la fotografía aérea del año 2017 cuando aparece por primera vez este añadido, no existiendo en la de 2016. Una falta, o aparición, según el año a revisar, que, a pesar de lo borrosa de la imagen, pensamos que se repite con el pórtico antes descrito.
Sigamos con la puerta principal, en la que, si continuamos el eje vertical hasta el tejado, vemos éste coronado por una espadaña con una pequeña campana y rematado por una cruz. Bajo ésta, leemos, en sendas cartelas de apariencia metálica:
"ERMITA
NSTRA.SRA VIRGEN DEL SOCORRO VILLAMANTA"
La imagen que, como era de esperar, se encuentra en su interior es la de la Virgen del Socorro, una talla policromada de fecha desconocida.
La ermita de Nuestra Señora del Socorro está incluida, con protección estructural, en el Catálogo de Bienes Protegidos del Ayuntamiento de Villamanta.
Localización: Paseo de la Ermita, 35. 28610 Villamanta.
El siguiente punto que destacamos, el Museo Etnográfico de Villamanta “Casa del Tío Breva”, se encuentra situado junto a la iglesia parroquial de Santa Catalina.
Antes de, someramente, recorrer el museo, detengámonos en el edificio sede del mismo, el cual tiene también una interesante historia. La “Casa del Tío de la Breva”, como era conocida, se cree que se construyó como casa de labor en el siglo XVI. Pero no es ésta la construcción más antigua de este lugar ya que, en su subsuelo, han aparecido los restos de otra construcción que, según alguna fuente, puede proceder del siglo II a.C.
Continuando con la construcción del XVI, se piensa, o al menos es opinión general, que este edificio es el nombrado en las Relaciones Topográficas de Felipe II, en donde leemos:
Continuando con la construcción del XVI, se piensa, o al menos es opinión general, que este edificio es el nombrado en las Relaciones Topográficas de Felipe II, en donde leemos:
L · AESYMACHO
QUIRINA ANNORVM
LXXXX·S·T·T· L·
AELIAE·POMPEI
VCSORI AR·XXX·"
Sobre la piedra, tenemos una posible traducción que dice:
"A LUCIO ESQUIMACO
DE LA TRIBU QUIRINA
DE NOVENTA AÑOS
QUE LA TIERRA TE SEA LEVE
DE SU MUJER ELIA POMPEYA
DE TREINTA AÑOS"
Esta piedra estuvo oculta durante muchos años hasta que en los 80 se demolió la casa aledaña.
Villamanta, Piedra berroqueña que vemos en la esquina izquierda del edificio conforme miramos hacia él. En ella está la inscripción "L · AESYMACHO..." que mencionamos en el artículo.
Posteriormente, en el siglo XVIII, en particular en 1776, se reformó y amplió como pósito, estando a cargo de dichas obras el arquitecto Manuel de Vera, autor, entre otras obras, de la Real Fábrica de Cera, en Madrid. El edificio resultante –en el que también estaba incluida la construcción aledaña– tenía planta en L, muros de cajones de tapial y ladrillo con refuerzos de este último y, sobre un alero113 de madera, cubierta a cuatro aguas de teja curva. La fachada principal constaba de la puerta de entrada, formada por un arco de medio punto con dovelas de piedra, una ventana en la planta baja y dos pequeños vsnos en la alta.
En 1997, se llevó a cabo una reforma de urgencia ante el estado de ruina en que se encontraba el edificio, de la que ha quedado la actual construcción, en donde los cajones de tapial y ladrillo han dado lugar, salvo la parte inferior, a una construcción de ladrillo que, enfoscando parte de ellos, imita los cajones de tapial. También se han abierto dos ventanas en la parte superior, sensiblemente diferentes a los dos pequeño huecos que tenía la construcción anterior, y se ha construido un nuevo alero ante la ruina del anterior. La cubierta actual del edificio en L es de tres aguas en el edificio principal y dos aguas en la parte trasera.
Inaugurado en el año 2011, el museo, como refiere su página web, está dividido en los siguientes cinco espacios: salas “Antigua Usanza”, Arqueológica, Antonio Simón Cuevas, de Proyección y unas Cuevas Subterráneas; en ellas, se presentan objetos del patrimonio arqueológico, cultural y etnográfico de Villamanta.
En la Sala “Antigua Usanza”, se exponen diferentes elementos relacionados con la actividad agropecuaria, anterior motor económico de la población. Entre ellos, se pueden citar útiles de labranza, un carro, etc.
En la Sala Arqueológica, se observan diferentes hallazgos arqueológicos de época romana encontrados en el municipio. Entre ellos, estelas y aras114 votivas115.
En la Sala Antonio Simón Cuevas, se exponen diferentes piezas de cerámica y pintura de este artista madrileño que, en 1936, donó su obra artística al Villamanta, localidad en la que había residido durante varias temporadas de verano.
En la Sala de Proyección, se reproduce un vídeo sobre el museo.
Las Cuevas Subterráneas son una red de galerías subterráneas utilizadas como bodegas, algo muy común en la zona y de las que aún permanecen algunas por explorar detenidamente. De hecho, en ellas, es donde se han hallado unos arcos que, según la fuente a consultar, pueden ser del siglo II a.C.
El edificio del museo está incluido, con protección ambiental, en el Catálogo de Bienes Protegidos del Ayuntamiento de Villamanta.
Localización: Calle Real, 17. 28610 Villamanta.
Pasemos, a continuación, al Hospital de pobres y viandantes, el primero de los tres edificios de uso público que vamos a recorrer en esta página. Los otros dos son el Ayuntamiento y las antiguas escuelas.
El antiguo Hospital de pobres y viandantes ya aparece reseñado en las Relaciones Topográficas de Felipe II, de 1576. En ellas, en la pregunta LIV sobre hospitales y obras pías existentes en la población, se menciona la existencia de un hospital, pobre y sin rentas, que se mantiene sólo de las limosnas. Su construcción se debe al paso por las inmediaciones del núcleo de población de la Cañada Real Segoviana. Estaba situado en la casa que Bartolomé Hernández, vecino de la localidad, donó para que se instalase en ella el hospital. Además, conforme a estas relaciones y dicha pregunta, se encuentran las memorias del clérigo Sebastián Sánchez y de la vecina Catalina Hernández, que dejaron su hacienda y tierras para que sus rentas se repartieran entre los pobres cada año, no como rentas del hospital, independientemente de que en alguna ocasión se usara con dicha intención, una cuestión ésta que desconocemos.
La sede del hospital, de la que tratamos en este artículo, ignorando si es la misma que donó Bartolomé Hernández, fue construida entre finales del siglo XVI y principios del XVII. Si consultamos la página 509 del tomo XIII “Arquitectura y Desarrollo Urbano. Comunidad de Madrid (zona Sur)”, podemos leer –basándose en el “Expediente de arriendo de la hacienda del hospital”, de 1830-1833– se habla de un hospital fundado por Josefa Frutos, quizás en el siglo XVII, cuyas tierras se desea cambiar de arrendamiento para obtener mejores beneficios, por lo que aquí sí tiene tierras y rentas el hospital. Su hacienda estaba formada, entre otros elementos, por olivares, viñedos, tierras de pan llevar y una bodega. Aquí, con la información de que disponemos, no sabemos si el hospital fundado por Josefa Frutos es el mismo que ya existía en el siglo anterior, una refundación del mismo u otro nuevo. Lo que sí tenemos es la información procedente del Diccionario Geográfico-Estadístico de España y Portugal, de entre 1826 y 1829, en donde se cita la presencia de dos hospitales en Villamanta.
En 1861, conforme al padrón de habitantes de ese año, esta antigua casona es contabilizada como casa-hospital. Por entonces, la construcción original y las instalaciones agropecuarias que tenía anexas por su lateral Oeste aparecen ya como dos propiedades distintas.
Una década después, en 1871, deja de funcionar como hospital, al ser enajenado por el Estado, y pasa, posteriormente, a manos privadas. Debido a ello, el Ayuntamiento toma la decisión de trasladar la instalación sanitaria hasta las casas municipales que habían funcionado como carnicería, en el barrio de la iglesia.
Actualmente, los dos cuerpos de que consta esta antigua casona, uno de dos alturas utilizado como vivienda y otro, de una, como cuadra y granero, se encuentran en muy mal estado. De planta irregular, tiene cubierta a dos aguas de tejas con un alero de madera sobre canecillos116 y unos muros realizados con cajones de tapial y ladrillo.
El cuerpo de la vivienda, en la que hay paños de sólo ladrillos, tiene una portada principal adintelada en piedra con un segundo dintel, formado por ladrillos dispuestos a sardinel117, colocado sobre ella. Este último tipo, el de los ladrillos a sardinel, es el que podemos observar en otros huecos de este mismo edificio. Junto a la portada, a su izquierda, según la miramos, observamos un saliente en forma de plano inclinado con seis agujeros que es el respiradero de la bodega que hay en el subterráneo.
El otro cuerpo del edificio –las instalaciones agropecuarias– se encuentra en un estado aún peor que la vivienda, al haberse desplomado la cubierta y el muro Oeste. No obstante, en la fachada principal, todavía es posible observar el aparejo a la toledana y uno de los vanos adintelado con ladrillos dispuestos a sardinel.
Este antiguo hospital, transformado en vivienda, forma parte, con protección ambiental, del Catálogo de Bienes Protegidos de Villamanta.
Localización: Plaza del Cerrillo, 1. 28610 Villamanta.
A continuación, desplacémonos hasta el Ayuntamiento, situado en la plaza del Rey Juan Carlos I, la misma donde también está el edificio de las antiguas escuelas, hoy Casa de Cultura.
El edificio del Ayuntamiento es de planta trapezoidal118, dos alturas y tejado a dos aguas sobre un alero, de los años 60, al que corta el cuerpo del reloj. La planta baja y la superior cuentan, respectivamente, con un pórtico y una galería sobre pilares de fundición que recorren gran parte de la fachada. En ellos, se abren una entrada principal, con el dintel formado por ladrillos dispuestos a sardinel, y dos ventanas en la baja, y cuatro ventanas y una puerta en la superior. Además de estos huecos, hay otros varios vanos más en los cuerpos de la fachada que, por la izquierda y por la derecha, se adelantan hasta alinearse con el pórtico y la galería anteriores. A la izquierda, según observamos la fachada desde la plaza del Rey Juan Carlos I, hay un eje de huecos, con el inferior, formado por una ventana adintelada con ladrillos dispuestos a sardinel, y el superior, por un balcón de rejería. En este cuerpo, se abren, además, sendas puertas al pórtico y la galería. El derecho, muy estrecho, no cuenta con ningún hueco frontal, pero sí con sendas puertas a los ya mencionados pórtico y galería.
Este inmueble es una construcción de, quizás, antes del siglo XVII que ha sido profusamente remodelada en varias reformas posteriores. Entre ellas, citamos las de los años 1788, 1858, 1871 y 1989, a cargo, respectivamente, del maestro albañil de la villa Antonio Fernández, del maestro de obras Tomás Paredes, del arquitecto de la Diputación José Asensio Berdiguer y del arquitecto de la Dirección General de Arquitectura de la Consejería de Política Territorial de la Comunidad de Madrid Víctor Izquierdo Miguel.
Otra reformas, no mencionadas antes de entre las varias sucedidas en el siglo XX, fueron la llevada a cabo en 1930, de la que proceden, seguramente, los pilares de fundición que vemos en su fachada, y la intervención de 1935, en la que se le colocó el actual reloj, conforme a la leyenda de una de las campanas que hay sobre él, en la que se lee:
Siendo alcalde D. Francisco Martín se colocó esta campana y reloj
Mateo Marot Año de 1935
Madrid
El Ayuntamiento forma parte, con protección ambiental, del Catálogo de Bienes Protegidos de Villamanta.
Localización: Plaza del Rey Juan Carlos I, 1. 28610 Villamanta.
En la misma plaza que el Ayuntamiento, se encuentra el edificio que albergaba las Escuelas, hoy Centro Cívico de la localidad.
Las antiguas escuelas fueron construidas a finales del siglo XIX, en particular, en el año 1892 (o 1896, según la fuente a consultar), por el arquitecto Daniel Zabala y Álvarez, autor, entre otros edificios, de la sede del desaparecido periódico “El Imparcial”. Este edificio tiene una planta rectangular de unos 11,40 x 7,50 metros; dos alturas, muros de ladrillo visto y cubierta a dos aguas, de tejas curvas, sobre un alero de ladrillos sustentado por canecillos de este mismo material. Una imposta119, también de ladrillo visto, colocada a sardinel, recorre toda la fachada, marcando claramente la separación entre ambas plantas. Otros elementos decorativos, igualmente de ladrillo, son los recercados de puertas y ventanas, así como las pilastras existentes en las fachadas de los laterales más estrechos.
Interiormente, la planta baja estaba destinada a colegio y la alta, a vivienda de los maestros. En la baja, había un aula de gran tamaño que fácilmente podía dividirse en dos, configurando así sendas escuelas de niños y niñas, de ahí la existencia de dos entradas en ambos extremos del lateral que da a la plaza del Rey Juan Carlos I –se situaron así para poder utilizarlas como entradas independientes de ambas escuelas–. En la planta alta, había dos viviendas idénticas para ambos maestros, con entrada independiente desde la calle.
En el año 1998, el arquitecto Antonio Azcona Olivera, de la Dirección General de Administración Local de la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid, reformó el viejo edificio como Centro Cívico, para lo cual, vació todo su interior, recreció su altura por encima de la cornisa y amplío el edificio, levantando un nuevo cuerpo con fachada a la calle San Blas.
Actualmente, este nuevo Centro Cívico lleva el nombre del pintor español don Antonio Simón Cuevas, el cual pasó varias temporadas de verano en el pueblo antes de donar su obra artística a la localidad. En su interior, coexisten, entre otras dependencias, la Biblioteca Municipal, la sala de lectura, un centro de educación de adultos, otro de manualidades, un punto de acceso público a internet, etc.
Las antiguas escuelas forman parte, con protección estructural, del Catálogo de Bienes Protegidos de Villamanta.
Localización: Plaza del Rey Juan Carlos I, 6 y 7. 28610 Villamanta.
Muy cerca de la iglesia, y al Sur de ella, se encuentra una antigua construcción de uso agropecuario destinada a la obtención de aceite: el antiguo Molino de Aracil. Tras su construcción, durante las primeras décadas del siglo XX, ha pasado, tras su rehabilitación, a ser una bonita edificación residencial formada por dos viviendas. El proyecto de rehabilitación, del año 1998, corresponde a la arquitecta doña María Jesús Fernández López.
Se trata de un edificio de planta rectangular, zócalo de mampostería, muros de mampostería enfoscada120 con refuerzo de ladrillo y tejado a dos aguas. Exteriormente, destacan en él, además de la diferencia entre el enfoscado y el ladrillo, los dinteles decorativos de sus vanos y la cornisa que recorre el edificio, ambos de ladrillo visto. Otros elementos a señalar de su hastial121 Sudoeste son las plantas trepadoras que lo recorren, delante de las cuales se encuentran situadas, con fines ornamentales, antiguas piedras de molino. Tras el vaciado de la construcción, se construyó un segundo piso, al que se dotó de la necesaria ventilación, abriendo por ello nuevos huecos en ambos hastiales, se elevó algo la cubierta y se instalaron sendas terrazas en el tejado.
El Molino de Aracil forma parte, con protección estructural, del Catálogo de Bienes Protegidos de Villamanta.
Localización: Travesía del Molino. 28610 Villamanta.
Otra antigua construcción agropecuaria, esta vez destinada a la obtención y almacenaje de vino, son las Bodegas Zorrilla, situadas al Sudoeste del núcleo de población, en la otra margen del arroyo Grande, junto al que fue apeadero de ferrocarril.
El edificio está formado por un cuerpo rectangular al que se anexa, por su lateral Noroeste, otro, también rectangular, de un tamaño sensiblemente menor. Como podemos leer en la página 521 del tomo XIII “Arquitectura y Desarrollo Urbano. Comunidad de Madrid (zona Sur)”, en este espacio podía estar situada la báscula de pesaje de la uva. Ambos cuerpos, construidos con ladrillo, tenían cubierta de tejado a dos aguas la bodega y a una la nave de la báscula.
La bodega, como elemento ornamental, sólo tiene la cornisa, también de ladrillo, pero, en este punto, colocados al modo de dientes de sierra. La entrada principal, situada en el centro del mismo lateral que la nave de la báscula, es de piedra y adintelada.
Como podemos observar a través de la fotografía adjunta, o de Google Maps, la bodega ha perdido el muro sudoeste y el tejado, viéndose los restos de este último, desplomados, sobre las tinajas de vino. Por detrás del edificio, se encuentra la chimenea de ventilación de la cueva subterránea donde también se almacenaba el vino.
Las Bodegas Zorrilla forman parte, con protección ambiental, del Catálogo de Bienes Protegidos de Villamanta.
Localización: Paseo de la estación. 28610 Villamanta.
Por delante de la anterior bodega, se encuentra expuesta, como otro elemento más del pasado agropecuario, una antigua Prensa de vino, de la que sólo queda la base, o plato prensador, de piedra; el eje central, o husillo; y el plato del tornillo junto a toda la maquinaria que, mediante funcionamiento manual, hacía que éste bajase, para prensar la uva, o subiese, para cargar más o vaciar tras el prensado los restos de la uva (los hollejos).
La prensa de vino forma parte, con protección integral, del Catálogo de Bienes Protegidos de Villamanta.
Localización: Paseo de la estación. 28610 Villamanta.
Terminamos nuestro recorrido por la antigua industria agropecuaria del municipio con la Casa de la Bomba, actual oficina de Turismo de Villamanta.
Este edificio, de planta rectangular, dos alturas y tejado a cuatro aguas, era anteriormente, según podemos leer en la página web del propio Ayuntamiento de Villamanta, un “antiguo matadero, inaugurado en el año 1894”. El matadero disponía de un corral anejo, en el que recoger las reses que iban a ser sacrificadas, y de un pozo de abundantes aguas. Puede que, por este último motivo, el pozo de abundantes aguas, sea por lo que este edificio es conocido como Casa de la Bomba.
Localización: Calle El Caño, 9. 28610 Villamanta.
Tras estas antiguas construcciones de la industria agropecuaria de Villamanta, podemos ahora recorrer otros elementos de gran importancia para cualquier industria, como son el transporte, mediante la antigua Estación de Ferrocarril de Villamanta y los puentes situados junto al núcleo urbano, o la energía, con el transformador de electricidad del siglo XIX.
Comencemos con la antigua Estación de Ferrocarril, situada junto a las Bodegas Zorrilla que acabamos de ver. Esta estación formaba parte de la línea de ferrocarril de vía estrecha Madrid-Almorox. Dicha línea estuvo funcionando entre 1901 y 1966, año en que se cerró el tramo que iba de Navalcarnero a Almorox. El resto se mantuvo en funcionamiento hasta 1970, momento en que fue clausurada definitivamente, aprovechándose parte del trayecto en la nueva línea de ferrocarril Madrid-Móstoles, cuyas obras se aprobaron en ese mismo año.
El edificio de la estación es una construcción de planta rectangular, dos alturas y tejado a dos aguas de teja curva. En su fachada principal –la que mostramos–, tiene, en la planta baja, una entrada y tres ventanas, rematadas todas con arco de medio punto, mientras que, en la superior, hay otras cuatro ventanas adinteladas que no forman eje sobre los huecos inferiores.
La antigua Estación de Ferrocarril forma parte, con protección ambiental, del Catálogo de Bienes Protegidos de Villamanta.
Localización: Paseo de la estación. 28610 Villamanta.
El Puente del Paseo de la Estación lo proyectó, en 1917, el ingeniero don José González González. Las obras comenzaron en 1919 y se terminaron en 1920. Inicialmente, se había pensado construir un puente metálico, pero se prefirió, por su menor coste, escoger uno de piedra.
En la actualidad, de la construcción original, sólo quedan las dos pilas122 de piedra elevadas sobre un basamento de planta rectangular. El primitivo tablero ha sido sustituido por otro de hormigón armado sustentado sobre las pilas y con sus laterales cerrados por una barandilla metálica.
El Puente del Paseo de la Estación forma parte, con protección estructural, del Catálogo de Bienes Protegidos de Villamanta.
Localización: Paseo de la estación. 28610 Villamanta.
El Puente de la M-530, que atraviesa el arroyo Grande, es, quizás, el de mayor valor estético de entre los puentes de Villamanta. Construido a finales del XIX o principios del XX en mampostería y ladrillo, está formado por tres arcos rebajados124 de ladrillo visto apoyados sobre pilas de sillarejo125 de sección elíptica que, a su vez, se elevan de un basamento rectangular.
El pretil126 del puente es de ladrillo y se levanta sobre una imposta de piedra, a la vez que lo remata una albardilla también de piedra.
Este puente tuvo que ser reconstruido en marzo de 2024 debido a los daños que sufrió por las fuertes precipitaciones causadas por el fenómeno Dana (Depresión Aislada en Niveles Altos) de septiembre de 2023.
El Puente de la M-530 forma parte, con protección integral, del Catálogo de Bienes Protegidos de Villamanta.
Localización: M-530. 28610 Villamanta.
Un elemento del paisaje urbano de Villamanta, muy frecuente de ver hasta no hace muchos años en nuestros pueblos y que hoy empieza a escasear, es la Torre del Transformador eléctrico.
De planta rectangular, muros de ladrillo visto y cubierta de teja árabe, tiene una única entrada, actualmente cegada, coronada por un dintel también de ladrillo. Sobre éste, y en la fachada Oeste, tiene una decoración de rombos que destaca entre sus lisos muros, al igual que las esquinas que sobresalen del nivel de éstos.
La Torre del Transformador forma parte, con protección estructural, del Catálogo de Bienes Protegidos de Villamanta.
Localización: Calle San Blas c/v calle Segovia. 28610 Villamanta.
En Villamanta, no han faltado normalmente las fuentes de agua; ya en las Relaciones Topográficas de Felipe II, en su pregunta XXIII, se afirma la existencia de fuentes y de muchos manantiales. Una de ellas es la Fuente del Caño Viejo, de la cual ya hay mención en el siglo XVIII de su acondicionamiento para aumentar su caudal.
A pesar de haberse tratado de las varias fuentes que ha tenido Villamanta a principios del siglo XIX, esta Fuente del Caño Viejo es la única con que cuenta el pueblo, volviéndose entonces a tener que remodelar entre los años 1820 y 1823, siendo entonces cuando adoptó sus formas actuales. Esta intervención no debió de resultar demasiado satisfactoria, pues a mediados de siglo, en 1846, es preciso volver a intervenir en ella. Unas obras que se repiten a finales de dicha centuria y en los años 20 del siglo XX.
Como podemos observar en la fotografía, se trata de una fuente mural de un solo caño construida de ladrillo y rematada con una albardilla de piedra.
La Fuente del Caño Viejo forma parte, con protección estructural, del Catálogo de Bienes Protegidos de Villamanta.
Localización: Calle del Caño Viejo, s/n. 28610 Villamanta.
La Fuente-abrevadero, o Fuente de los Tres Caños, aunque actualmente sólo dispone de dos, se compone de un abrevadero rectangular construido en granito y apoyado contra un muro de mampostería en donde podemos ver el caño central y el de la derecha, según miramos hacia la fuente. Su situación en un espacio rehundido dotado de unos árboles y bancos hace de él un pequeño lugar de plácido solaz.
Según leemos la página 514 del tomo XIII de “Arquitectura y Desarrollo Urbano. Comunidad de Madrid (zona Sur)”, existe la posibilidad de que esta fuente fuera construida en 1924.
La Fuente-abrevadero forma parte, con protección integral, del Catálogo de Bienes Protegidos de Villamanta.
Localización: Barranco del Caño. 28610 Villamanta.
El Aljibe romano, Fuente Grande o Pozo de la Villa se encuentra situado en la calle de la Fuente Grande.
El aljibe es forma rectangular y tiene las paredes construidas con sillarejo. En la fotografía que acompaña a este artículo, vemos, al fondo, un brocal de forma octogonal alargada similar –si no es el mismo– al que formaba parte de la Fuente Grande instalada en este lugar, sobre el Pozo de la Villa, en el año 1924. En su parte central, falta el pináculo127 de dos caños que entonces poseía.
El aljibe romano forma parte, con protección integral, del Catálogo de Bienes Protegidos de Villamanta.
Localización: Calle de la Fuente Grande. 28610 Villamanta.
Villamanta cuenta también con un interesante conjunto de viviendas urbano-rurales construidas en el siglo XIX o principios del XX, algunas de ellas blasonadas128, y que podemos dividir en dos tipos de edificaciones.
Por un lado, tenemos la casa de dos plantas típica de la zona centro, con fachada revocada129, zócalos oscuros, ventanas en la planta baja y balcones en la alta. Las cubiertas suelen ser de teja curva y cuentan con aleros apoyados sobre canecillos.
Entre este tipo de viviendas, tenemos, como uno de los ejemplos más sobresalientes, el palacete –así es nombrado en el Catálogo de Bienes Protegidos y será dicho nombre el que usemos en cada una de las viviendas que veamos a continuación– situado en la calle de José García Núñez, 5. Un segundo edificio de este tipo es la casa solariega blasonada, con una portada del siglo XVII, en particular, del año 1699, situada en el número 7 de esta misma calle. Bastantes de las siguientes construcciones se concentran en esta vía.
Ambas viviendas forman parte, con protección ambiental, del Catálogo de Bienes Protegidos de Villamanta.
Localización: Calle de José García Núñez, 5 y 7. 28610 Villamanta.
Villamanta, De izquierda a derecha en el sentido de las agujas del reloj: Casa rural, casa rural-almancen, y casa solariega.
El segundo tipo de construcción, del que mostramos más casas, es la vivienda urbano-rural neomudéjar, es decir, de ladrillo visto, bien solo o bien combinado con mampostería, en cuyo caso se trataría de aparejo toledano. Esta construcción puede ser de una o dos plantas, aleros de ladrillo y cubiertas, también de teja curva, a dos aguas.
Entre ellas, destacamos, inicialmente, tres viviendas, la casa rural situada en la Plaza del Rey Juan Carlos I, 14; la casa rural-almacén que vemos en la calle Roma, 16; y la casa solariega de la calle Real, 18. Todas ellas son de estilo neomudéjar sin aparejo toledano.
La casa rural se encuentra situada junto al Ayuntamiento, donde en los siglos XVI y XVII se encontraba la carnicería de Villamanta. Es un edificio de dos alturas, de fachada muy estrecha de ladrillo visto, balcón de forja y cubierta a dos aguas. De ladrillo son también tanto los adornos de los dos vanos como el alero.
La casa rural-almacén consta de una sola planta, fachada de ladrillo visto y cubierta a dos aguas. Tiene una puerta y dos ventanas, y, a tenor del gran arco existente sobre la puerta y sobre el espacio situado a la izquierda, según la miramos, debía de haber sido un edificio sensiblemente más grande. Tanto los adornos de la fachada, entre los que predominan los rombos, como los de los huecos y el alero son de ladrillo.
La casa solariega es un edificio de dos plantas situado frente a la iglesia. También tiene toda la fachada de ladrillo visto, así como los adornos de la fachada –entre los que también hay rombos–, de los huecos, la imposta o el alero. Cuenta con tres ejes de huecos verticales, con ventanas –además de la puerta de entrada– en la planta baja y balcones en la superior.
Localización: Plaza de Juan Carlos I, 14; Real, 18; y Roma, 16. 28610 Villamanta.
Villamanta, Comenzando por arriba, a la izquierda y en el sentido de las agujas del reloj: Casa rural, vivienda rural-casa solariega, casa rural-palacete, casa solariega-blasonada.
Las siguientes cuatro viviendas que mostramos a continuación son, igualmente, de estilo neomudéjar, pero con aparejo toledano (recordemos: cajones de mampostería con verdugadas de ladrillo) en la fachada. Éstas son la casa rural de la calle de José García Núñez, 4; la vivienda rural-casa solariega de la calle de José García Núñez, 13; la casa rural-palacete de la calle Mantua Carpetanum, 16; y la casa solariega-blasonada de la calle Real, 16.
La casa rural consta de dos plantas, un desván y tejado a dos aguas. La fachada cuenta con dos ejes de huecos perpendiculares, con ventana y puerta en el inferior, balcones en el superior y ventanas rematadas por arcos rebajados en el desván. Todos los huecos están recercados con ladrillo.
La vivienda rural-casa solariega tiene, igualmente, dos plantas, alero de ladrillo, tejado a dos aguas y tres ejes de vanos. Todos éstos están recercados de ladrillo y formados por puerta y ventanas enrejadas en la planta inferior y balcones en la superior.
La casa rural-palacete, de planta rectangular y tejado a cuatro aguas, es, por sus dimensiones, estado y calidad de construcción, la más llamativa de todas estas viviendas. Tiene dos alturas, con una imposta dividiendo ambas, y un alero sobre canecillos, ambos de madera, rematando la fachada. La fachada Este tiene dos ejes de huecos, con puerta y ventana en la planta inferior y balcones en la superior; en la fachada Sur, son cinco los ejes de huecos, todos ellos ventanas; la fachada Oeste sólo cuenta con una ventana en la planta inferior y una buhardilla130; la fachada Norte no es visible desde la calle, pero sí se ven otras dos buhardillas, siendo posible que tenga una disponibilidad de vanos similar a la del Sur: cinco ejes de huecos, con alguna puerta que comunique con el jardín.
La casa solariega-blasonada es otro edificio de dos plantas, con la parte derecha, según la miramos, toda ella de aparejo toledano, mientras que la izquierda tiene la planta baja también de este tipo, a diferencia de la superior, que está revocada. Cuenta con dos ejes de huecos en esta fachada, con ventana y puerta en la inferior, y balcones en la superior. Por encima, un alero sobre canecillos, ambos de madera, corona la fachada, siendo la cubierta a dos aguas.
Todas estas viviendas –excepto la casa rural-palacete de la calle Mantua Carpetanum, 16, que la tiene estructural– forman parte, con protección ambiental, del Catálogo de Bienes Protegidos de Villamanta.
Localización: Calles de José García Núñez, 4 y 13; Mantua Carpetanum, 16; y Real, 18. 28610 Villamanta.
Lourdes Morales Farfán es Licenciada en Periodismo por la Universidad Rey Juan Carlos. ↑
Desde "una Ventana desde Madrid", queremos agradecer a don Guillermo Gascón, responsable del Museo Etnográfico de Villamanta “Casa del Tío Breva”, por la esmerada atención y la gran información aportada mientras nos ofrecía un ameno y completo recorrido por la Iglesia Parroquial de Santa Catalina, el ya mencionado Museo y el Hospital de Pobres y Viandantes.
- 1 Relaciones Topográficas de Felipe II: Las “Relaciones Topográficas de los Pueblos de España” (o “Relaciones histórico-geográficas de los pueblos de España”, según otros autores), realizadas por orden de Felipe II, fue una obra estadística con la que el rey pretendía dar una descripción lo más detalladamente posible de todas y cada una de las poblaciones que existían en los reinos bajo su mandato. Está formada por un total de siete tomos (seis para pueblos y ciudades, y uno monográfico para Toledo) y su original se encuentra en la biblioteca del Monasterio de San Lorenzo de El Escorial. Su estructura es la de un cuestionario concreto con interrogantes (o capítulos, como se llama en la obra) que tratan sobre diferentes aspectos (demográficos, sociológicos, estratégicos, geográficos y económicos) de las localidades. Estas preguntas debían ser respondidas por una delegación de hombres viejos, sabios o letrados, dando tanta información de cada municipio como fuera posible. ↑
- 2 p.m.s.: Abreviatura de primera mitad del siglo XV. ↑
- 3 c.: Abreviatura de circa (hacia). ↑
- 4 Sexmo: División territorial que comprendía cierto número de pueblos asociados para la administración de bienes comunes. ↑
- 5 Aranzada: Medida agraria de superficie, equivalente en Castilla a 4.472 m2 y de valor variable en otras regiones. ↑
- 6 Viso: Altura desde donde se descubre mucho terreno. ↑
- 7 Pechero: Obligado a pagar o contribuir con pecho8. ↑
- 8 Pecho: Tributo que se pagaba al rey, al señor territorial o a cualquier otra autoridad. ↑
- 9 Maravedí: Moneda antigua española, efectiva unas veces y otras imaginaria, que tuvo diferentes valores y calificativos. ↑
- 10 Chancillería: En la corona de Castilla, cada uno de los dos altos tribunales radicados en Valladolid y Granada. ↑
- 11 Legua: Medida itineraria, variable según los países o regiones, definida por el camino que regularmente se anda en una hora, y que en el antiguo sistema español equivale a 5.572,7 metros. ↑
- 12 Arcipreste: Presbítero que, por nombramiento del obispo, ejerce ciertas atribuciones sobre los curas e iglesias de un territorio determinado. ↑
- 13 Boyal: Perteneciente o relativo al ganado vacuno. Aplicado comúnmente a las dehesas o prados comunales donde el vecindario de un pueblo suelta o apacienta sus ganados, aunque estos no sean vacunos. ↑
- 14 Ejido: Campo común de un pueblo, lindante con él, que no se labra, y donde suelen reunirse los ganados o establecerse las eras. ↑
- 15 Diezmo: Tributo del diez por ciento que sobre el valor de ciertas mercancías recibía el rey. // Contribución que pagaban los fieles a la Iglesia, consistente en la décima parte de sus frutos. ↑
- 16 Bastimento: Provisión para sustento de una ciudad, de un ejército, etc. ↑
- 17 Cahiz: Medida de capacidad para cereales, diferente según las regiones. ↑
- 18 Tapial: Pared o trozo de pared que se hace con tierra amasada. ↑
- 19 Epígrafes: Inscripción en piedra, metal, etc. ↑
- 20 Berroqueño: Granítico. ↑
- 21 Hidalgo: Persona que por linaje pertenecía al estamento inferior de la nobleza. ↑
- 22 Alcalde ordinario: Vecino de un pueblo que ejercía en él jurisdicción ordinaria. ↑
- 23 Alcalde de hermandad: Alcalde que se nombraba cada año en los pueblos para que conociera de los delitos y excesos cometidos en el campo. ↑
- 24 Cuadrillero: Individuo de una cuadrilla de la Santa Hermandad25. ↑
- 25 Santa Hermandad: Tribunal con jurisdicción propia, que perseguía y castigaba los delitos cometidos fuera de poblado. // Partida de hombres armados, dependientes de la Santa Hermandad, que mantenían el orden fuera de poblado. ↑
- 26 Alcabala: Tributo del tanto por ciento del precio que pagaba al fisco el vendedor en el contrato de compraventa y ambos contratantes en el de permuta. // Tributo que pagaba el forastero por los géneros que vendía. ↑
- 27 Martiniega: Tributo o contribución que se debía pagar el día de San Martín. ↑
- 28 Moneda forera: Tributo que, en los territorios de la Corona de Castilla, se pagaba al rey cada siete años a cambio de que el soberano no alterase la ley, el peso y el curso legal de la moneda. ↑
- 29 Aneja: Iglesia parroquial de un lugar, por lo común pequeño, sujeta a la de otro pueblo en donde reside el párroco. ↑
- 30 Concejo de la Mesta: Junta que los pastores y dueños de ganados tenían anualmente para tratar de los negocios concernientes a sus ganados o gobierno económico de ellos, y para distinguir y separar los animales sin dueño conocido que se hubiesen mezclado con los suyos. ↑
- 31 Mojonería: Tributo que se cobraba a los ganados foráneos por entrar en un término municipal. ↑
- 32 Almotacén: Empleado público que contrastaba pesas y medidas. // Oficina donde se contrastaban pesas y medidas. Las tasas que se pagaban por este control se llamaba almotacenía. ↑
- 33 Fiel medidor: Oficial que asistía a la medida de granos y líquidos. ↑
- 34 Servicio o impuesto de Millones: Impuesto instaurado por Felipe II en 1590 por el que se gravaban determinados productos y que se renovaba de seis en seis años. Se mantuvo hasta el siglo XVIII. ↑
- 35 Mero imperio: Potestad que residía en el soberano y, por delegación, en ciertos señores o magistrados, para imponer, previo proceso, penas a los delincuentes. ↑
- 36 Mixto imperio: Facultad que residía en el soberano y, por delegación, en algunos señores o jueces para decidir las causas civiles y ejecutar las sentencias. ↑
- 37 Ducado: Moneda de oro que se usó en España hasta fines del siglo XVI, de valor variable. // Moneda no acuñada equivalente a once reales de vellón, aumentada en una mitad más por la pragmática de febrero de 1680, y vuelta después a su valor primero. ↑
- 38 Behetría: Antiguamente, población cuyos vecinos, como dueños absolutos de ella, podían recibir por señor a quien quisiesen. ↑
- 39 Censo de Campoflorido: Censo realizado en 1712, siguiendo las órdenes del Real Consejero de Hacienda, con el fin de distribuir de forma más justa las cargas asociadas a la Guerra de Sucesión y que constituyó el primer censo de toda España, excepto País Vasco y Navarra. En 1717, tras la orden dada por el Marqués de Campoflorido de concentrarlo en la Secretaría de Hacienda, bajo su mando, tomó su nombre de Censo de Campoflorido ↑
- 40 Catastro del Marqués de la Ensenada: Con el nombre de Catastro del Marqués de la Ensenada se conoce un censo de la población y de la riqueza de Castilla (con excepción de las provincias vascas, que no pagaban impuestos) realizado con fines fiscales, entre los años 1749 y 1756, por el ministro de Fernando VI D. Zenón de Semovilla y Bengoechea, Marqués de la Ensenada. ↑
- 41 Vecino/Habitante: Como vecino se contabiliza únicamente al cabeza de familia y cada uno de ellos equivale, aproximadamente, a 4 o 5 habitantes. ↑
- 42 Cuestionario del Cardenal Lorenzana: Cuestionario que constaba de catorce preguntas y que tomaba su nombre del que fuera su promotor, el Cardenal Francisco Antonio de Lorenzana y Butrón (León, 22 de septiembre de 1722 - Roma, 17 de abril de 1804), que las mandó realizar en 1784 para de recabar información de todo tipo sobre la archidiócesis. Dichas preguntas debían ser contestadas por los vicarios, jueces eclesiásticos y curas párrocos del arzobispado. ↑
- 43 Fanega: Medida agraria que, según el marco de Castilla, contiene 576 estadales44 cuadrados y equivale a 64,596 áreas47, pero varía según las regiones. ↑
- 44 Estadal cuadrado: Medida superficial o agraria que tiene 16 varas cuadradas45 y equivale a 11,226 m2. ↑
- 45 Vara cuadrada: Cuadrado que tiene de lado una vara46. ↑
- 46 Vara: Medida de longitud que se usaba en distintas regiones de España con valores diferentes, que oscilaban entre 768 y 912 mm. ↑
- 47 Área: Unidad de superficie equivalente a 100 metros cuadrados. ↑
- 48 Arroba: Peso equivalente a 11,502 kg. ↑
- 49 Fiebres tercianas: Calentura intermitente que repite cada tercer día. ↑
- 50 Censo de Floridablanca: Censo realizado por el ministro de Carlos III José Moñino y Redondo, Conde de Floridablanca, entre 1786 y 1787, y al que se considera el primer censo de población española realizado con técnicas modernas. En él, se obtuvo información sobre la estructura poblacional conforme a sexo, edad y estado civil, y una ordenación económica de todas las localidades de España. ↑
- 51 Beneficiado: En la Iglesia católica, presbítero o clérigo que goza de un beneficio eclesiástico. ↑
- 52 Acólito: En el catolicismo, seglar que ayuda en el altar y administra la eucaristía como ministro extraordinario. // En el catolicismo, monaguillo que ayuda al sacerdote en la misa y en otros actos litúrgicos. // En el catolicismo, eclesiástico al que se le había conferido la superior de las órdenes menores, y cuyo ministerio en la Iglesia primitiva era servir al altar. ↑
- 53 Recuento de Antonio Regàs: Investigación estadística de los 120 municipios que entonces formaban la provincia de Madrid que, entre 1824 y 1825, realizó el ingeniero e inventor Antonio Regàs Borrell i Berenguer. ↑
- 54 Sebastián Miñano: Sebastián Miñano y Bedoya (Becerril de Campos, Palencia, 1779 - Bayona, Fracia, 1845) fue, además de escritor, periodista y político, un geógrafo e historiador español, autor del "Diccionario geográfico y estadístico de España y Portugal", una colección de 11 volúmenes publicada entre 1826 y 1829 y que está considerada como la más destacada obra de su tipo hasta la publicación del Diccionario de Madoz55. ↑
- 55 Diccionario de Pascual Madoz: El “Diccionario geográfico-estadístico-histórico de España y sus posesiones de Ultramar” es una obra publicada entre los años 1846 y 1850 por Pascual Madoz. Según confiesa el autor, su realización le llevó más de quince años y contó para ello con la labor de veinte corresponsales y más de mil colaboradores. Este Diccionario está formado por 16 volúmenes en los que se describen todas las poblaciones de España, incluyendo en algunos casos su historia. ↑
- 56 Pósito: Institución de carácter municipal y de muy antiguo origen, dedicada a hacer acopio de cereales, principalmente de trigo, y prestarlos en condiciones módicas a los labradores y vecinos durante los meses de escasez. ↑
- 57 Yermo: No cultivado. ↑
- 58 Tercia: Casa en que se depositaban los diezmos (tributos). ↑
- 59 Hijuela: Expedición postal que lleva las cartas a los pueblos que están fuera de la carrera. ↑
- 60 Cayetano Rosell y López: Bibliógrafo, dramaturgo, editor, historiador y traductor español nacido en Aravaca (Madrid) en 1817 y fallecido en Madrid en 1833. Oficial archivero de la Biblioteca Nacional en 1844 y miembro de la Real Academia de la Historia en 1856, que entre muchas otras obras, de ellas algunas comedias y zarzuelas, además de traducciones, escribió en 1865 la “Crónica de la provincia de Madrid”. ↑
- 61 Andrés Marín Pérez: Bibliotecario de la Diputación provincial de Madrid y autor, entre otras, de la “Guía de Madrid”, una obra Geográfica-Histórico-Estadística de la provincia de Madrid publicada en los años 1888-1889. ↑
- 62 Escuela incompleta: Escuelas incompletas son aquellas que no tienen la etapa de Educación Primaria completa, estando los alumnos agrupados bien por ciclo o bien por varios distintos cursos. ↑
- 63 Sistema simultáneo: Clasificar a los niños en secciones con arreglo a su instrucción y dirigirse en la enseñanza a varios a la vez, en lugar de hacerlos a uno solo, de modo que cada discípulo se aproveche de la instrucción que se da a sus compañeros. ↑
- 64 Iguala: Convenio entre médico y cliente por el que aquel presta a este sus servicios mediante una cantidad fija anual en metálico o en especie. ↑
- 65 Hectárea: Medida de superficie equivalente a 100 áreas. ↑
- 66 Valijero: Hombre que tenía a su cargo conducir las cartas desde una caja o administración de correos a los pueblos que de ella dependían. ↑
- 67 De hecho y de derecho: Distinción jurídico-administrativa entre los habitantes que están empadronados en un población determinada (de derecho) y los que, en el momento de contabilizar un censo, se encuentran en la misma, estén empadronados allí o no (de hecho). ↑
- 68 Juan Ortega Rubio: Historiador español nacido en Puebla de Mula (Murcia) en 1845 y fallecido en Madrid en 1921. Fue catedrático de historia en la Universidad Complutense de Madrid y publicó, entre otras obras, “Los pueblos de la provincia de Valladolid”, en 1895, e “Historia de Madrid y de los pueblos de su provincia”, en 1921. ↑
- 69 Escuela unitaria: Escuela, normalmente situada en el ámbito rural, en el que uno o dos maestros deben de atender a un pequeño número de alumnos, de diferente edad y grado de instrucción, durante toda la etapa de enseñanza primaria. ↑
- 70 Pan llevar: Conjunto de productos agrícolas de primera necesidad. ↑
- 71 Grecorromano: Perteneciente o relativo a griegos y romanos, o compuesto de elementos propios de uno y otro pueblo. ↑
- 72 Churriguerismo: Estilo de ornamentación recargada empleado por Churriguera, arquitecto y escultor barroco de fines del siglo XVII, y sus imitadores en la arquitectura española del siglo XVIII. ↑
- 73 Atrio: Espacio descubierto, rodeado de pórticos, que hay en la entrada de algunos edificios. ↑
- 74 Coche de línea: Autobús que hace el servicio regular de viajeros entre poblaciones. ↑
- 75 Edificaciones en compacto: Edificaciones levantadas en un núcleo de población siendo éste un conjunto formado por un número determinado de ellas que forman calles, plazas, etc. ↑
- 76 Edificaciones en diseminado: Edificaciones aisladas. ↑
- 77 Colono: Labrador que cultiva y labra una heredad por arrendamiento y suele vivir en ella. ↑
- 78 Aparcero: Persona que tiene aparcería79 con otra u otras. ↑
- 79 Aparcería: Trato o convenio de quienes van a la parte en una granjería80. ↑
- 80 Granjería: Ocupación, trabajo o actividad de las que se obtiene una ganancia o fruto. // Comercio. ↑
- 81 Agua: Vertiente de un tejado. ↑
- 82 Mampostería: Obra hecha con mampuestos83 colocados y ajustados unos con otros sin sujeción a determinado orden de hiladas o tamaños. ↑
- 83 Mampuesto: Piedra sin labrar que se puede colocar en obra con la mano. ↑
- 84 Arco de medio punto: Arco que consta de una semicircunferencia. ↑
- 85 Capitel: Parte superior de una columna o de una pilastra, que la corona con forma de moldura y ornamentación, según el orden arquitectónico a que corresponde. ↑
- 86 Ochavado: Dicho de una figura: De ocho ángulos iguales y ocho lados iguales cuatro a cuatro y alternados. ↑
- 87 Arco apuntado: Arco que consta de dos centros situados en la línea de arranque. ↑
- 88 Lado del Evangelio y lado de la Epístola: En una Iglesia, se llama lado del Evangelio al situado en la parte izquierda desde el punto de vista de los fieles, mirando éstos hacia el altar, mientras que el de la Epístola es el de la parte derecha. Toman este nombre de los lados del presbiterio89 desde donde se lee el Evangelio y la Epístola durante la misa. ↑
- 89 Presbiterio: Área del altar mayor hasta el pie de las gradas por donde se sube a él, que regularmente suele estar cercada con una reja o barandilla. ↑
- 90 Hueco: Abertura en un muro para servir de puerta, ventana, chimenea, etc. ↑
- 91 Dintel: Pieza horizontal superior de puertas, ventanas y otros huecos, apoyada en sus extremos sobre las jambas92 y destinada a soportar cargas. ↑
- 92 Jamba: Cada una de las dos piezas que, dispuestas verticalmente en los dos lados de una puerta o ventana, sostienen el dintel o el arco de ella. ↑
- 93 Dovela: Piedra labrada en forma de cuña, para formar arcos o bóvedas, etc. ↑
- 94 Óculo: Ventana pequeña redonda u ovalada. ↑
- 95 Aparejo: Forma y modo de disponer, tallar y enlazar los materiales de una construcción. ↑
- 96 Verdugo: Hilada horizontal, doble o sencilla, de ladrillo en una fábrica de tierra o mampostería. ↑
- 97 Cornisa: Parte superior del entablamento98 de un pedestal, edificio o habitación. ↑
- 98 Entablamento: Conjunto de molduras que corona un edificio o un orden de arquitectura y que ordinariamente se compone de arquitrabe99, friso100 y cornisa. ↑
- 99 Arquitrabe: Parte inferior del entablamento, la cual descansa inmediatamente sobre el capitel de la columna. ↑
- 100 Friso: Parte del entablamento en los órdenes clásicos que media entre el arquitrabe y la cornisa, en ocasiones ornamentado de triglifos101, metopas107 u otros elementos. ↑
- 101 Triglifo: Adorno del friso dórico102 que tiene forma de rectángulo saliente y está surcado por dos glifos106 centrales y medio glifo a cada lado. ↑
- 102 Orden dórico: Orden que tiene la columna de ocho módulos103 o diámetros a lo más de altura, el capitel sencillo y el friso adornado con metopas y triglifos. ↑
- 103 Módulo: Medida que se usa para las proporciones de los cuerpos arquitectónicos. En la antigua Roma, era el semidiámetro del fuste104 en su parte inferior. ↑
- 104 Fuste: Parte de la columna que media entre el capitel y la basa105 ↑
- 105 Basa: Asiento sobre el que se pone la columna o la estatua. ↑
- 106 Glifo: Canal vertical poco profundo que decora el frente de los triglifos en los órdenes clásicos. ↑
- 107 Metopa: En el friso dórico, espacio que media entre triglifo y triglifo. ↑
- 108 Exento: Aislado, independiente. ↑
- 109 Albardilla: Caballete o tejadillo que se pone en los muros para que el agua de la lluvia no los penetre ni resbale por los paramentos. ↑
- 110 Escurialense: Perteneciente o relativo al monasterio de El Escorial. ↑
- 111 Orden toscano: Orden que se distingue por ser más sólido y sencillo que el dórico. ↑
- 112 Éntasis: Parte más abultada del fuste de algunas columnas. ↑
- 113 Alero: Parte inferior del tejado, que sale fuera de la pared y sirve para desviar de ella las aguas llovedizas. ↑
- 114 Ara: Altar donde se celebran ritos religiosos. ↑
- 115 Votivo: Ofrecido por voto o relativo a él. ↑
- 116 Canecillo: Modillón: Miembro voladizo sobre el que se asienta una cornisa o alero, o los extremos de un dintel. ↑
- 117 Sardinel: Obra de albañilería hecha con los ladrillos colocados de canto, en posición vertical, adosados por sus caras. ↑
- 118 Trapezoide: Cuadrilátero irregular que no tiene ningún lado paralelo a otro. ↑
- 119 Imposta: Faja saliente de poco volumen, en la fachada de los edificios, que marca el forjado del piso. ↑
- 120 Enfoscado: Capa de mortero con que está guarnecido un muro. ↑
- 121 Hastial: Parte superior triangular de la fachada de un edificio, en la cual descansan las dos vertientes del tejado o cubierta, y, por extensión, toda la fachada. ↑
- 122 Pila: Cada uno de los machones123 que sostienen dos arcos contiguos o los tramos metálicos de un puente. ↑
- 123 Machón: Pilar de fábrica. ↑
- 124 Arco rebajado: Arco cuya altura es menor que la mitad de su luz. ↑
- 125 Sillarejo: Piedra de dimensiones menores a las del sillar, con una labra menos cuidada y cuyas dimensiones no llegan al espesor del muro. ↑
- 126 Pretil: Murete o vallado de piedra u otra materia que se pone en los puentes y en otros lugares para preservar de caídas. ↑
- 127 Pináculo: Remate piramidal o cónico que en la arquitectura gótica cumple una doble función, estética y estructural. ↑
- 128 Blasón: Escudo de armas. ↑
- 129 Revoco: Revestimiento continuo con mortero de cal, yeso y en ocasiones cemento, que se aplica en las fachadas sobre un enfoscado. ↑
- 130 Buhardilla: Ventana que se levanta por encima del tejado de una casa, con su caballete cubierto de tejas o pizarras, y sirve para dar luz a los desvanes o para salir por ella a los tejados. ↑
AUTOBUS:
INTERURBANOS:
.
- Línea 541: Madrid (Príncipe Pío) - Villamanta - La Torre de E. Hambran.
- Línea 545: Madrid (Príncipe Pío) - Cenicientos - Sotillo de la Adrada.
- Línea 546: Madrid (Príncipe Pío) - Rozas de Puerto Real - Casillas.
- Línea 547: Madrid (Príncipe Pío) - Villa del Prado - Almorox - Aldea en Cabo.
- Línea 548: Madrid (Príncipe Pío) - Aldea del Fresno - Calalberche.
CARRETERAS:
Desde Madrid:
- Por la A-5 (45 min; 44,2 km).
- Por Autovía del Suroeste/Paseo de Extremadura/A-5 (54 min; 56,7 km).
TREN:
METRO:
METRO LIGERO/TRAVÍA:
Los datos de comunicaciones se han tomado, en junio de 2024, del Ayuntamiento de Villamanta, de la web del Consorcio de Transportes de Madrid y de Google Maps no haciéndose "una Ventana desde Madrid (uVdM)" responsable de su exactitud o posterior modificación.
Siglo XIV
- Alfonso XI, Rey de Castilla: "Libro de la Montería del Rey Alfonso XI. Con un discurso y notas del Excmo Señor D. José Gutiérrez de la Vega. Tomo II"; Imprenta y fundición de M. Tello, impresor de camara de S.M.; Madrid; 1877.
Siglo XVI
- “Censo de Pecheros de Carlos I. 1528. Tomo I”; Instituto Nacional de Estadística; Madrid; 2008.
- Francisco Javier Hernando Ortego y Carlos de la Hoz García: "Relaciones Topográficas de Felipe II"; Instituto de Estudios Madrileños; I.S.B.N.:84-00-06657-X; Depósito Legal: M.-34.894-1987; Madrid; 1987.
- “Censo de Castilla. 1591. Vecindario”; NIPO web 729-16-005-9.
Siglo XVIII
- “Censo de Campoflorido, 1712. Vecindario General de España. Tomo I: Manuscritos”; Instituto Nacional de Estadística; Madrid; NIPO web 729-16-003-8.
- “Censo de Población de la Corona de Castilla. Marqués de la Ensenada 1752. Tomo I: Instituto Nacional de Estadística; Madrid; Manuscritos”; NIPO web: 729-16-006-4
- “Censo de Población de la Corona de Castilla. Marqués de la Ensenada 1752. Tomo III: Instituto Nacional de Estadística; Madrid; Menestrales”; NIPO web: 729-16-006-4
- “Censo Ganadero de la Corona de Castilla de 1752. Tomo I: Seglares”; Instituto Nacional de Estadística; Madrid; NIPO web: 729-16-007-X
- “Censo Ganadero de la Corona de Castilla de 1752. Tomo II: Eclesiásticos”;Instituto Nacional de Estadística; Madrid; NIPO web: 729-16-007-X
- - Descripciones del Cardenal Lorenzana. Descripción de los pueblos de todas las vicarías foráneas
- “Censo de 1787 "Floridablanca". Tomo II Comunidades Autónomas de la Submeseta Sur"; NIPO web: 729-16-002-2.
Siglo XIX
- "Recuento de Antonio Regàs. Vecinos (1824-1825)"
- Sebastián de Miñano: “Diccionario Geográfico-Estadístico de España y Portugal. Tomo IX”; Imprenta de Pierart-Peralta; Madrid; 1828.
- Pascual Madoz: “Diccionario Geográfico-Estadístico-Histórico de España y sus posesiones de Ultramar. Tomo XV”; IMPRENTA del Diccionario geográfico-estadístico-histórico DE D. PASCUAL MADOZ; Madrid; 1849.
- Cayetano Rosell y López: “Crónica de la provincia de Madrid”; Madrid, 1865; Comunidad de Madrid, AGE (COCULSA); ISBN: 84-500-9500-X; Depósito Legal: M-41587-1983.
- Andrés Marín Pérez: “Guía de Madrid y su provincia. Tomo II”; Escuela tipográfica del Hospicio; Madrid; 1888.
Siglos XX y XXI
- Juan Ortega Rubio: “Historia de Madrid y de los Pueblos de su Provincia. Tomo II”; Imprenta Municipal; Madrid; 1921.
- Antonio Cantó Téllez: “Guía de la Provincia de Madrid” (2ª edición); Excma. Diputación Provincial - Oficina de Prensa; Depósito Legal: M-6355-1958.
- VV.AA.: “Diccionario Geográfico de España. Tomo 17”; Artes Gráficas Clavileño, S.A.; Madrid; 1961; Depósito Legal: M.263-1958.
- Fernando Jiménez de Gregorio: Madrid y su Comunidad. Territorio, historia, econocmía, sociedad; Editorial El Avapiés, S.A.; I.S.B.N.:84-86280-20-6; Depósito Legal: M.30.921-1986.
- G. Fatás y G.M. Borrás: "Dicionario de Términos de Arte"; Alianza Editorial, S.A.; ISBN: 84-7838-388-3, Depósito Legal: M-26.868-1993.
- Agustín Izquierdo (dirección editorial): “En torno al Alberche”; Colección “Biblioteca Madrileña de Bolsillo / Pueblos y ciudades”; Servicio de Publicaciones de la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid; ISBN: 84-451-1743-2; Depósito Legal: M-6709-2000.
- VV.AA.: “Arquitectura y Desarrollo Urbano. Comunidad de Madrid. Tomo XIII. Zona Sur”; Edita: Dirección General de Arquitectura y Vivienda. Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio. Fundación Caja de Madrid. Fundación COAM; ISBN: 84-451-2699-7; Depósito Legal: M-50.273-2004
Varios
- INE: Instituto Nacional de Estadística - Madrid: Población por municipios y sexo
- INE: Instituto Nacional de Estadística - Alteraciones de los municipios en los Censos de Población desde 1842, Villamanta
- Plan General de Ordenación Urbana. Catálogo de Bienes Protegidos
- Nomecalles. Villamanta
- Instituto de Estadística de la Comunidad de Madrid - Macromagnitudes y participación social - Villamanta
- Real Academia de la Historia | Esquivel, Pedro de
- Real Academia de la Historia | Morales, Ambrosio de
- Real Academia de la Historia | Chacón, Gonzalo
- Tesauros del Patrimonio Cultural de España | Mantua Carpetanorum
- Fundación Medinaceli | Gonzalo Chacón y Ayala, Conde de Casarrubios del Monte
- Museo “Casa del Tío Breva”
- Federación Castellano Manchega de Amigos del Ferrocarril | Madrid-Goya a Almorox
- Ayuntamiento de Villamanta | Como llegar
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