Haz clic aquí para volver a la página de inicio
una Ventana desde Madrid

Museos de Madrid

Templo de Debod

Por Lourdes Morales Farfán


Templo de Debod

¿Qué pensarían si les dijésemos que pueden visitar un auténtico monumento egipcio sin salir de Madrid? Muchos ya lo conocerán, pero quizá para algunos sea la primera vez que oyen hablar de él. Hoy visitaremos el Templo de Debod, conoceremos su historia y los avatares que ha vivido a lo largo de los siglos, y recorreremos su interior, detallando cada una de las estancias que hay distribuidas a lo largo de sus dos plantas. No es nuestro cometido ahondar en la historia de Egipto, para lo cual necesitaríamos muchísimo más espacio y tiempo, por lo que comenzaremos metiéndonos de lleno con la historia y la visita al templo.

Los orígenes de este santuario los encontramos hacia los años 200-180 a. de C., cuando el rey Adijalamani, o Azakeramón, ordena la construcción de un templo en Debod, en la región de Nubia (tierra compartida actualmente entre Egipto y Sudán), formando parte de una especie de itinerario de santuarios que desembocaba en la isla de Filé, donde, según la tradición, la diosa Isis tuvo a su hijo Horus. Sin embargo, a nuestros días no ha llegado nada de la ciudad en la que fue construido. Por otro lado, algunas tesis apuntan a la posibilidad de que ya existiera un templo anterior a este en dicha zona, si bien no se han encontrado elementos arquitectónicos que avalen dicha hipótesis.

Templo de Debod, Vía de acceso principal

Su construcción se llevó a cabo durante algo más de 200 años, pudiéndose distinguir tres etapas principales en su desarrollo. La primera sería la Etapa Meroítica, la cual se corresponde con la edificación de la Capilla de Adijalamani, núcleo del templo, por orden de este rey de Meroe entre los años 200-180 a. de C. La segunda es la Etapa Ptolemaica1, durante la cual los faraones de esta dinastía realizaron una serie de ampliaciones que transformaron el santuario; sin embargo, la falta de la mayor parte de las decoraciones hace que no tengamos nombres concretos de faraones y que, por tanto, sea difícil atribuir cada ampliación y su alcance. Sí se conoce el nombre de al menos tres de estos faraones: Ptolomeo VI Filómetor (180-145 a. de C.), mencionado en el remate del segundo pilono 2; Ptolomeo VIII (145-116 a. de C.), "fundador", como ya veremos, de la desaparecida "naos" dedicada a Isis; y Ptolomeo XII (80-51 a. de C.), quien aparece en la "naos" conservada del dios Amón. Y finalmente, la Etapa Romana (no olvidemos que Egipto estará bajo la dominación del Imperio Romano desde el año 30 a. de C.), momento en que se circunscriben la fachada principal y el vestíbulo, donde aparecen relieves con los emperadores Octavio Augusto y Tiberio. Tras estas intervenciones, no se llevó a cabo ninguna más, ni siquiera para terminar aquellos elementos que quedaron inacabados, como algunas decoraciones.


* * *
Vista del Templo de Debod por la noche

Su uso religioso, en cambio, debió mantenerse hasta comienzos de la época bizantina. Además, la continuación del culto a la diosa Isis hizo que los santuarios de la zona del sur de Egipto continuaran en pie incluso después de que en el resto de la región ya se hubiera instaurado el cristianismo. Sin embargo, cuando el emperador Justiniano conquista Nubia para el Imperio Bizantino entre los años 535-537 d. de C., cierra el templo de Isis en Filé, terminando así el culto a la diosa en la zona. Y mientras que en Filé se instaló una comunidad cristiana bajo la advocación de San Esteban, el Templo de Debod quedó sumido en el abandono, lo que, al menos, sirvió para que llegara a nuestros días mejor conservado que sus contemporáneos. Desde ese momento, poco se sabe de su suerte. Se conoce, gracias a las intervenciones arqueológicas, que existió una vivienda medieval frente al primer pilono y otra entre el primero y el segundo, aunque sin fecha concreta. Asimismo, también se han localizado algunos grabados en los que se representaron cruces, camellos y alguna inscripción árabe.

Entre los siglos XVII y XIX, el templo sufriría la pérdida de numerosos elementos, como sillares, parte del embarcadero, etc. A esto, se sumó el terremoto que tuvo lugar en 1868 y que destruyó la fachada principal y parte del vestíbulo. De todo ello tenemos constancia gracias a los diferentes documentos gráficos de la época. Más adelante, entre 1896 y 1906, el pilono más cercano a la fachada se derrumba por completo. En el año 1907, se construye la segunda fase de la presa vieja de Asuán, lo que conllevó que los templos de la Baja Nubia quedaran bajo el agua gran parte del año, entre ellos el de Debod. Esto trajo nuevas consecuencias, como el derrumbe del primer pilono y la erosión de las paredes, con la pérdida de nitidez de los relieves y la lamentable destrucción de las pinturas interiores.

En 1955, comenzaron los estudios para construir una presa con mayor capacidad. El peligro que esto suponía para los monumentos hizo que la UNESCO organizara la "Campaña de Salvamento de los Monumentos de la Nubia". Así, el gobierno de Egipto se comprometió a donar algunas de estas obras a países que hubieran colaborado en la campaña. En 1960, el Templo de Debod fue desmontado; cuatro años después, en 1964, España solicitó que el santuario fuese instalado en nuestro país, petición que sería aprobada en 1968, decidiéndose en 1970 que el lugar elegido sería el solar del antiguo Cuartel de la Montaña, en Madrid. A partir de entonces, comenzaba una faraónica (y nunca mejor dicho) labor de reconstrucción del templo que concluyó en 1972, año en que sería abierto al público para disfrute de todos sus visitantes.

Localización: Jardines del Templo de Debod. Calle Ferraz, 1.


* * *
Templo de Debod, Primer pilono

Conocida ya su historia, pasemos a hacer una breve descripción del exterior del templo antes de adentrarnos en su interior. Su orientación original era hacia el Nilo, estando la fachada principal mirando al Este, algo que se respetó cuando fue instalado en su nueva ubicación. En el río, había construido un embarcadero formado por dos muros entre los que se disponían unos escalones por los que se accedía al agua. A su vez, lo unía a la entrada del templo una "vía sacra" de 180 metros de largo que estaba aislada del exterior por otros dos muros. Ambos elementos quedaron en su lugar de origen cuando el templo fue trasladado a Madrid. Asimismo, el conjunto estaba delimitado por un muro de 75 metros de largo por 54 de ancho, el cual contaba con algunas puertas de acceso secundarias, mientras que la entrada principal se hacía a través de los pilonos.

Éstos eran monumentales puertas que estaban formadas por el portal en sí y dos torres laterales, las cuales podían tener dentro algún espacio para almacenaje, o defensa. Como podemos ver en la fotografía, los pilonos del Templo de Debod perdieron sus torres con el paso de los siglos. Las esquinas estaban decoradas con molduras circulares y rematadas con una cornisa curva. Si bien los templos ptolemaicos solían contar con uno y/o dos pilonos, el de Debod tenía tres, habiéndose perdido el más cercano al templo en el siglo XIX. De esos tres, sólo el segundo (actualmente el que ha quedado frente al santuario) tiene algo de decoración, algo que veremos cuando visitemos el Mammisi. Por los pilonos se accedía a tres patios, estando el último justo frente al acceso del edificio.


Templo de Debod, Fachada principal

Antes de entrar en el templo, nos detendremos a observar su Fachada principal, la cual presenta un elemento bastante característico en este tipo de edificios: el muro de intercolumnios4, también conocido como "muro de cortina", muy utilizado en gran parte de las construcciones del período ptolemaico. Se trata, pues, de un muro que llega hasta la mitad de altura de la fachada; sobre él, se apoyan una serie de columnas (cuatro en el Templo de Debod) compuestas por fuste5 cilíndrico y liso, y capitel6. En el centro, hay una puerta que nos da paso al interior del templo y que está formada por dintel7 y gola8 partidos. Finalmente, toda la fachada queda enmarcada por un toro9 y una gola como remate.

Si nos fijamos en la parte central de la gola y el dintel que hay sobre la puerta, veremos dos sillares lisos que sobresalen. Éstos estaban reservados para colocar en ellos representaciones del disco solar alado, las cuales nunca fueron llevadas a cabo. También cabe mencionar que en la pared de intercolumnios había una serie de relieves con escenas de ofrendas y enmarcados por molduras.


Templo de Debod, Fachada principal, capiteles

Lamentablemente, en el siglo XIX la fachada original fue destruida, siendo la que vemos en la actualidad una reconstrucción hecha en 1970. En lo que se refiere a los capiteles, éstos eran de tipo compuesto10 y estaban formados por flores de papiro que, colocadas en distintos niveles, daban la apariencia de ramilletes pétreos. De los cuatro que vemos aquí, los dos centrales fueron tallados, mientras que los de los extremos quedaron sin labrar y con una apariencia esquemática. En total, se han conservado tres capiteles originales: uno, en la fachada; y dos, en el vestíbulo, estando uno tallado y el otro no. Del cuarto sólo han sobrevivido unos fragmentos.

La parte de los intercolumnios contaba con relieves tanto en el exterior como en el interior, pero por desgracia desaparecieron al destruirse la fachada. Por suerte, se han conservado algunas fuentes documentales que han ayudado a mantener viva la descripción de la decoración; ejemplo de ello son las fotografías realizadas por el arqueólogo Maxime Ducamp entre 1849 y 1851, antes de que se perdieran. Estos relieves eran de época romana, concretamente del siglo I (época de los emperadores Augusto y Tiberio), y estaban compuestos por franjas corridas, siendo similares a los de la Capilla de Adijalamani.

Los relieves interiores de esta parte de la fachada los detallaremos más adelante, al hablar del vestíbulo. En el exterior, el protagonista era el emperador Augusto, quien estaba representado, de izquierda a derecha, adorando al dios Amón, ofreciendo la diosa Maat al dios Osiris, ofreciendo un vaso a la diosa Isis y, por último, presentándose ante el dios Mahesa.


* * *
Templo de Debod, Vestíbulo

Una vez vista la fachada principal, entramos al interior del templo y vemos, en primer lugar, el Vestíbulo, o "pronaos", en el cual nos llamará la atención su apariencia diáfana, llena de luz y completamente despejada. Generalmente, en otros templos ptolemaicos, estas estancias suelen contar con varias columnas, lo que hace que se las denomine "salas hipóstilas16"; sin embargo, como vemos, esto no ocurre con el vestíbulo en el que nos hallamos.

En él, hay cuatro puertas. Una se abre en el muro Sur y comunica con el mammisi, que detallaremos más adelante, mientras que las tres restantes están en el muro Oeste. De éstas últimas, la de la derecha nos lleva a la denominada Capilla Norte; la del centro, da paso a la Capilla de Adijalamani; y, finalmente, la de la izquierda comunica con la escalera que lleva a un corredor, a la Capilla Osiríaca y a la terraza, elementos todos ellos que iremos recorriendo a lo largo de este reportaje.


Templo de Debod, Vestíbulo, relieve

Durante el siglo XIX, como ya hemos apuntado, la fachada principal y gran parte del vestíbulo quedaron destruidos. A pesar de ello, testimonios documentales nos han aportado datos acerca de la decoración a base de relieves con que contaba esta estancia. En ellos, estaban representados los emperadores romanos Augusto y Tiberio realizando una serie de ofrendas a los dioses; de aquí, tan sólo han llegado a nuestros días los de la pared de la izquierda. Cabe mencionar que esta pared era la original del edificio principal que construyó el faraón Adijalamani, pudiendo verse las líneas de los bloques adosados que delimitan dicha edificación.

Para tener una visión más clara del conjunto de relieves que podían contemplarse en el interior del vestíbulo, los enumeraremos mejor de forma esquemática:


- Interior del lado derecho de los intercolumnios interiores, de derecha a izquierda: 1) Tiberio siendo purificado por los dioses Thot y Horus con el dios Amón presente; y 2) Augusto saliendo del palacio con estandartes y en presencia del gran erudito egipcio Imhotep.

- Interior del muro Norte, de derecha a izquierda: 1) Augusto ofreciendo libaciones e incienso a los dioses Osiris, Isis y Horus; y 2) Augusto ofreciendo la figura de la diosa Maat a los dioses Amón-Ra y Mahesa.

- Interior del muro Sur, de derecha a izquierda (aquí sí se ha conservado un fragmento): el emperador (no esculpido) está frente a los dioses Osiris, Isis, Shepses-Nofret, Harpócrates (desaparecidos) e Imhotep (quedan sus piernas y parte del cuerpo), éste portando una tablilla de jeroglíficos y la cruz "anj17".

- Jamba izquierda de la puerta Sur: tiene esculpido un "ureus", símbolo sagrado en forma de cobra que representa a la diosa Uadyet y que los faraones utilizaban como elemento protector; éste está enroscado en un tallo de papiro. Podría ser símbolo de la diosa Wadjet.

- Muro interior Oeste (muy deteriorado), protagonizado por el emperador Augusto: a la izquierda de la puerta de la Capilla de Adijalamani, le vemos 1) ofreciendo un toro, una gacela y un antílope a la diosa Isis, y 2) dando tres ramas florecidas a los dioses Isis y Osiris; a la derecha, se ve al emperador 1) ofreciendo frutos a los dioses Amón y Mahesa, y 2) dando dos vasos de vino al dios Thot de Pnubs.

- Parte superior de la puerta Norte: cuenta con un relieve del disco solar alado, completado con algunos jeroglíficos. Es posible que en la jamba izquierda hubiera existido un símbolo parecido al de esta misma jamba, pero de la puerta Sur, sólo que en este caso sería de la diosa Nekhebet.


Templo de Debod, Capilla de Adijalamani

Dejamos atrás el Vestíbulo y nos adentramos en la Capilla de Adijalamani, de planta rectangular y construida, de cara al exterior, con sus muros dispuestos en talud18. Dedicada a los dioses Isis y Amón de Debod, fue erigida por el faraón Adijalamani de Meroe y se trata de la única que posee de manera íntegra y terminada la decoración de relieves, habiéndose conservado hasta nuestros días. En ellos, las escenas hacen referencia a ofrendas, aunque los veremos con mayor detenimiento y detalle un poco más adelante. En su interior, se cree que originariamente hubo tabernáculos19 e imágenes religiosas, por lo que en ella sería donde se llevaría a cabo el culto. En lo que concierne a la decoración exterior, sólo se ha conservado un sillar donde aparece este faraón como titular del templo original y que podemos ver expuesto en la terraza.

Más adelante, cuando el templo es ampliado, serán otras estancias las que tengan este uso, quedando la capilla como una sala de paso con funciones desconocidas hasta el momento, si bien es posible que fuera utilizada como sala de ofrendas.

Cuando, como decimos, pasó a formar parte de una edificación más compleja, su estructura se vio afectada ya que fue necesario comunicarla con las salas posteriores. Así, se abrió una puerta en el muro Oeste para dar paso al santuario, que veremos más adelante, de tal modo que la capilla quedaría como una sala entre dos vestíbulos.

Como apuntábamos antes, esta capilla se encuentra cubierta en su interior por relieves e inscripciones, decoración que mantiene una composición formada, de abajo a arriba, por un zócalo de flores de papiro abiertas y cerradas; sobre éste, hay dos franjas en las que aparecen diferentes escenas con el faraón; finalmente, arriba cuenta con un friso de adornos que, en origen, estaba policromado, colores que en el año 1911 aún se mantenían. En cuanto al techo, se componía de vigas y las pinturas representaban un cielo estrellado con buitres volando. Pero veamos con más detalle las 24 escenas que componen los relieves que encontramos en la Capilla de Adijalamani y que tienen como protagonista a este faraón egipcio; para ello, usaremos el mismo modo esquemático que utilizamos con el vestíbulo:


Templo de Debod, Capilla de Adijalamani, pared derecha

En la pared derecha, de izquierda a derecha y de arriba (a) a abajo (b), el faraón aparece: 1a) ofreciendo la diosa Maat a Amón; 1b) haciendo una ofrenda al dios Khnum-Ra; 2a) dando dos vasos de vino a Amón; 2b) ofreciendo perfumes a los dioses Amón y Mut; 3a) haciendo una libación frente a los dioses Khnum y Satis; 3b) ofreciendo al dios Harpócrates una bandeja con frutas, panes, dos ocas y ramas; 4a) dando un vaso de agua al dios Khnum y a la diosa Anukis (ésta figura no se conserva); 4b) invocando al dios Shu y a la diosa Tefnut; 5a) dando a Amón una bandeja con panes; 5b) ofreciendo el templo al dios Amón; 6a) muestra varias columnas con jeroglíficos; 6b) el faraón es purificado por el dios Thot.


Templo de Debod, Capilla de Adijalamani, pared izquierda

En la pared izquierda, de izquierda a derecha y de arriba (a) a abajo (b), Adijalamani está igualmente presente en actos similares: 1a) como en la anterior, se muestran una serie de columnas con jeroglíficos; 1b) el faraón es purificado por el dios Horus con un vaso lustral20; 2a) ofreciendo un pan a Isis; 2b) dando un pectoral a la misma diosa; 3a) ofrece la diosa Maat a los dioses Ra-Harakthi y Apset; 3b) presentando a los dioses Min y Neftis un "udjat", u "Ojo de Horus", símbolo mágico del que se considera que tiene funciones sanadoras, de purificación y de protección, todo ello representando la estabilidad y la perfección; 4a) el faraón da un "udjat" a los dioses Horus y Hathor; 4b) ofreciendo pan y vino a Harpócrates y Nekhebet; 5a) dando un pectoral a Osiris e Isis; 5b) llevando a cabo una fumigación y una libación frente a Osiris e Isis; 6a) ofreciendo dos sonajas a Isis; 6b) dando dos vasos de aceite a una diosa cuyo relieve no se ha conservado y que podría haber sido Isis.


Templo de Debod, Vestíbulo interior

Avanzamos y tenemos una pequeña estancia que hace la función de Vestíbulo interior. En ella, sus muros carecen de decoración, o relieves de ningún tipo, pero sí cuenta con una serie de aberturas que nos comunican con otras salas del templo. Así, la pared del Oeste se abre a nosotros para llevarnos al santuario, mientras que las de los extremos izquierdo y derecho nos conducen a sendas capillas laterales. Esto lo veremos más detenidamente a continuación.


Templo de Debod, Santuario o Capilla de Naos

Atravesamos el vestíbulo interior y accedemos al Santuario, o Capilla de la Naos, zona más sagrada de todo el templo. La puerta que nos conduce a él cuenta en la parte superior con un sillar liso reservado, como ya vimos en la entrada principal, a un disco solar alado; en origen, tenía dos batientes21 y estaba cerrada todo el día salvo por las mañanas, que era cuando, diariamente, se llevaba a cabo el culto frente a la divinidad. En cuando a las paredes interiores, éstas no están decoradas; sin embargo, es posible ver algunas marcas dejadas en el siglo XIX, así como algunas de cruces cristianas.

Hasta dicho siglo, dentro del santuario se conservaron dos "naos": la más antigua estaba dedicada a Isis, fue construida por mandato del faraón Ptolomeo VIII y desapareció entre los años 1821 y 1827; la otra es la que actualmente ha llegado a nuestros días. Con unas medidas de 198 x 90 x 81 centímetros, es algo más pequeña que la anterior y fue levantada por Ptolomeo XII para el dios Amón. Hasta el siglo XIX, se encontraba ubicada más retrasada y hacia la esquina Noroeste del santuario, estando la de Isis en el centro. Ambas estaban construidas con bloques de granito rosado y se encontraban rematadas por un friso de "ureus". Debajo, había tres discos solares alados.

En la fotografía, vemos la hornacina que acogía la estatua del dios y que en la actualidad, como apreciamos en la imagen, aparece representado por un proyector, lo que nos da una idea del uso primitivo de la "naos". La parte frontal contaba, a los lados, con sendas columnas rematadas con capiteles similares a los que vimos en la fachada principal, así como con jeroglíficos en los que se hace mención de los faraones donantes. Bajo la hornacina, había otros dos discos solares alados y dos representaciones enmarcadas de Hapi, el dios Nilo, que aparece arrodillado atando los tallos de papiro y loto alrededor de una traquea, símbolo de la unión del Alto y el Bajo Egipto. Ambas hornacinas eran similares; sin embargo, en la de Isis, estas figuras de Hapi aparecen de pie.


Templo de Debod, Capilla lateral Norte

Las otras dos puertas que se abrían a izquierda y derecha del vestíbulo interior nos conducen a sendas Capillas laterales, las cuales se cree que pudieron estar destinadas a otras divinidades secundarias del templo. Sin embargo, sus muros carecen de decoración, por lo que no quedan definidos de manera clara y definitiva cuáles fueron sus usos. Si contemplamos su función ligada al culto, la del Sur (izquierda) pudo estar dedicada a dioses relacionados con Isis, como Osiris, entre otros; por parte, la del Norte (derecha y que vemos en la fotografía) lo estaría a divinidades como Mut, o Mahesa.

En cuanto a su construcción, ésta data del mismo momento en que se levantó la Capilla de la Naos.

Por otro lado, ambas capillas cuentan con dos pequeñas estancias que, en su día, estarían cerradas por un sillar, pero que ahora vemos abiertas. Puede que fuesen utilizadas como "tesoros", o lugar donde guardar, por ejemplo, estatuas, u objetos sagrados.


Templo de Debod, Capilla Norte

Una vez llegados aquí, retrocedemos para continuar con el recorrido propuesto para el templo. Así, regresamos al vestíbulo y nos dirigimos a la puerta que se abre a la derecha, la cual da acceso a la Capilla Norte. Se trata de una estancia rectangular que carece de decoración y que se ha interpretado como una sala "uabet", en la cual se llevaban a cabo ceremonias de purificación.


Templo de Debod, Mammisi

De aquí, nos trasladamos al otro extremo del vestíbulo, donde en su muro Sur hay una puerta que nos lleva a una de las estancias que más caracteriza a un templo de este tipo: el Mammisi, una sala de planta rectangular construida de forma perpendicular al resto del edificio.

Jean-François Champollion (Figeac, departamento de Lot, 23 de diciembre de 1790 - París, 4 de marzo de 1832), uno de los más importantes egiptólogos de la historia, usó el vocablo "mammisi", o "capilla del nacimiento" si atendemos a su significado copto22, para aquellas construcciones levantadas de forma adosada a los templos ptolemaicos y en las que se llevaban a cabo ceremonias relacionadas con la concepción, el nacimiento y la entronización23 del dios-hijo de la pareja de dioses para quienes se hubiera hecho el templo. Estas estancias se solían edificar en el exterior y frente al acceso del templo; además, se encontraban decoradas con relieves relacionados con el tema de la capilla. Sin embargo, el mammisi de Debod está adosado al edificio principal y no aparte; y, por otro lado, carece de cualquier tipo de decoración. En su interior, sólo podemos observar un elemento que rompe la uniformidad de sus muros: se trata de una especie de nicho24 cuadrangular que se abre en el muro Oeste.


Templo de Debod, Remate segundo pilono

Actualmente, en esta sala podemos ver el remate del segundo pilono del Templo de Debod. Éste tiene un relieve de un disco solar alado que representa al dios Behedeti flanqueado por dos "ureus". Además, también cuenta con una inscripción en griego que fue interpretada en el siglo XIX como:

"En nombre del rey Ptolomeo y de la reina Cleopatra, hermana y esposa del rey. De entre los dioses Filométores, dedicado a Isis y a las demás divinidades adoradas en su templo".

Igualmente, unos jeroglíficos nos dicen:

"Behedeti, dios grande, señor de los cielos, de plumaje multicolor. El que surge del Horizonte, primero de..., que da la vida eternamente".


Templo de Debod, Corredor del Muro Sur

Finalmente, a la izquierda de la Capilla de Adijalamani hay una entrada que nos lleva a dos elementos más del edificio y que veremos antes de subir a la planta superior. El primero de ellos está a la derecha de la especie de descansillo en que nos encontramos y se trata de un pequeño y estrecho Corredor que discurre por el muro Sur de la capilla y con la misma longitud que éste.

Es precisamente en esta pared donde hay un grabado de formas geométricas al que algunos expertos le han dado la interpretación de ser un "gnomon25", o reloj de sol, si bien otros afirman que corresponde a una marca que ha quedado de la preparación de la pared que se realizaba antes de la decoración. Tal y como se recoge en el libro "Templo de Debod", de Carmen Priego y Alfonso Martín Flores, tiene forma de:

"círculo cortado en cuatro por dos diámetros26 perpendiculares y recortado por dos secantes27 perpendiculares a las extremidades de los diámetros".


Templo de Debod, Escalera de subida a la terraza

Por último, llegamos a la Escalera, que asciende hasta la terraza del templo. Aquí, cabe señalar la importancia que solía tener este elemento en algunas celebraciones, según los datos aportados por diversos expertos. Por ejemplo, en aquellas en las que las estatuas que representaban a los dioses eran trasladadas a la terraza de los templos para absorber el sol del nuevo año.


* * *
Templo de Debod, Capilla Osiríaca

Subimos por la escalera y, al final del primer tramo y antes de subir el segundo, se nos abre a la derecha una entrada que da acceso a la denominada Capilla Osiríaca. Se trata de una estancia rectangular cuyos muros no cuentan con decoración y que servía para realizar todos aquellos rituales que estaban relacionados con la vida, muerte y resurrección del dios Osiris.

Hoy, podemos ver en su interior una maqueta de lo que pudo ser el Templo de Debod si hubiera llegado a nuestros días por completo, la cual nos hace tener una mejor idea de lo que hemos contado al inicio de este reportaje en cuanto a su estructura y composición externa se refiere.


Templo de Debod, Maqueta de los templos de la región de Nubia existente en la terraza

Y terminamos de subir el segundo tramo de escalera para visitar la Terraza del templo, espacio que en su origen servía para llevar a cabo determinadas ceremonias a cielo descubierto, pero que en su día se cubrió para su mejor conservación.

En la actualidad, varios son los elementos relacionados con el Templo de Debod que se han dispuesto en ella a modo de exposición. Una de las primeras cosas que veremos nada más entrar será una gran maqueta en la que se nos muestra, de manera interactiva, los templos con que contaba la región de Nubia, uno de los cuales era el de Debod.


Templo de Debod, Sillar de titularidad

Entre los restos arqueológicos, podremos ver, por ejemplo, el sillar de titularidad que mencionábamos en el artículo dedicado a la Capilla de Adijalamani. Su ubicación original era sobre la puerta de entrada a la capilla y destaca por ser donde se cita de manera más completa al faraón como su titular. Para entender esto, debemos explicar que la titularidad clásica de los faraones estaba compuesta por cinco nombres: el suyo de nacimiento y cuatro añadidos una vez que eran proclamados reyes. En este caso concreto, los títulos que aparecen en el sillar, repetidos a ambos lados, son: el de Horus "Imagen de Ra, elegido de los dioses"; el de Rey del Alto y Bajo Egipto "Imagen de Ra, elegido de los dioses"; y el de Hijo de Ra "Adijalamani, amado de Isis". También hay otro sillar, de menores dimensiones que el anterior, que estuvo colocado igualmente sobre la puerta, pero en el interior de la capilla. En éste, posiblemente se recogía la titularidad de manera más breve, ya que sólo se representan los títulos de Rey del Alto y Bajo Egipto, y el de Hijo de Ra.


Templo de Debod, Sillares y estela

Además de éstos, hay otros sillares con escenas de ofrendas de los que se desconoce la ubicación de algunos, mientras que otros pudieron formar parte de la decoración exterior del vestíbulo, pues fueron encontrados entre los escombros cuando fue destruido. También merece nuestra atención una estela hallada entre algunos restos de la Capilla de Adijalamani. En ella, sólo se puede ver la parte inferior de una escena en la que se muestra a un rey frente a una divinidad sentada que porta en su cabeza una corona. En los laterales, aparecen una serpiente (derecha) y un león (izquierda) protegiendo el monumento.



Finalizamos aquí nuestra visita al Templo de Debod, un lugar que, a pesar de tan pequeñas dimensiones, nos deja con la sensación de estar rebosante de historia entre sus muros, especialmente al ser conscientes de los avatares que ha vivido y de los siglos que acumulan sus sillares, siendo así el monumento más antiguo que podemos visitar en Madrid.

No podemos alejarnos de la zona sin antes rodear el templo y dedicar unos minutos a asomarnos al mirador que hay tras él, desde donde obtendremos unas magníficas vistas de Madrid.


Lourdes Morales Farfán es Licenciada en Periodismo por la Universidad Rey Juan Carlos. ↑


* * *

AGRADECIMIENTOS

En "una Ventana desde Madrid" queremos dar las gracias a D. Alfonso Martín Flores, actual conservador del Templo de Debod (año 2013), sin cuya ayuda y atención en todo momento no hubiera sido posible la realización de este reportaje.



GLOSARIO

- 1 Época ptolemaica: Perteneciente o relativo a la dinastía macedónica que reinó en Egipto desde finales del siglo IV hasta finales del siglo I a. C.
- 2 Pilono: Construcción hecha de gruesos muros y con forma de pirámide truncada 3. Solía estar ubicado en el exterior de algunos templos del Antiguo Egipto.
- 3 Pirámide truncada: Parte de la pirámide comprendida entre la base y otro plano que corta a todas las aristas laterales.
- 4 Intercolumnio: Espacio entre dos columnas.
- 5 Fuste: Parte de la columna que media entre el capitel y la basa.
- 6 Capitel: Remate superior de la columna o de la pilastra, que la corona con forma y ornamentación que varían, según el estilo arquitectónico a que corresponde.
- 7 Dintel: Parte superior de las puertas, ventanas y otros huecos que carga sobre las jambas.
- 8 Gola: Moldura cuyo perfil tiene la forma de una s, esto es, una concavidad en la parte superior, y una convexidad en la inferior.
- 9 Toro: Bocel. // Moldura.
- 10 Orden Compuesto: El que en el capitel de sus columnas reúne las volutas11del jónico12con las dos filas de hojas de acanto del corintio13, guarda las proporciones de este para lo demás y lleva en la cornisa dentículos14y modillones 15 sencillos.
- 11 Voluta: Adorno en forma de espiral o caracol, que se coloca en los capiteles de los órdenes jónico y compuesto.
- 12 Orden Jónico: El que tiene la columna de unos nueve módulos o diámetros de altura, el capitel, adornado con grandes volutas, y dentículos en la cornisa.
- 13 Orden Corintio: El que tiene la columna de unos diez módulos o diámetros de altura, el capitel adornado con hojas de acanto y caulículos, y la cornisa con modillones.
- 14 Dentículo: Cada uno de los adornos con forma de paralelepípedo rectángulo que, formando fila, se colocan en la parte superior del friso del orden jónico y en algunos otros miembros arquitectónicos.
- 15 Modillón: Miembro voladizo sobre el que se asienta una cornisa o alero, o los extremos de un dintel.
- 16 Hipóstila: Dicho de un edificio o de un recinto: Especialmente en las arquitecturas antiguas, de techo sostenido por columnas.
- 17 Cruz "anj": Cruz que simbolizaba la vida y que la solían llevar los dioses, ofreciéndola en ocasiones al faraón.
- 18 Talud: Inclinación del paramento de un muro o de un terreno.
- 19 Tabernáculo: Sagrario donde se guarda el Santísimo Sacramento.
- 20 Vaso lustral: Vaso que era utilizado en las ceremonias con un fin de purificación.
- 21 Batiente: Parte del cerco de las hojas de puertas, ventanas y otras cosas semejantes, en que se detienen y baten cuando se cierran. // Cada una de las hojas de una puerta o ventana.
- 22 Copto: Cristiano de Egipto. En su mayoría son eutiquianos, pero los hay católicos con su rito especial. // Idioma antiguo de los egipcios, que se conserva en la liturgia propia del rito copto.
- 23 Entronización: Acción y efecto de entronizar o entronizarse. // Colocar en el trono. // Ensalzar a alguien, colocarlo en alto estado. // Colocar una imagen o una representación iconográfica en un lugar preferente para que sea venerada o admirada.
- 24 Nicho: Concavidad en el espesor de un muro, para colocar en ella una estatua, un jarrón u otra cosa.
- 25 Gnomon: Antiguo instrumento de astronomía, compuesto de un estilo vertical y de un plano o círculo horizontal, con el cual se determinaban el acimut y altura del Sol, observando la dirección y longitud de la sombra proyectada por el estilo sobre el expresado círculo.
- 26 Diámetro: Segmento de recta que pasa por el centro del círculo y cuyos extremos están en la circunferencia.
- 27 Secante: de una línea o de una superficie: Que corta a otra línea o superficie.

DATOS DE INTERES

HORARIOS DE APERTURA/VISITA:
De 1 de octubre a 31 de marzo:

- Martes a viernes de 9:45 a 13:45 y de 16:15 a 18:15 horas.
- Sábados, domingos y festivos de 9:30 a 20:00 horas.

De 1 de abril a 30 de septiembre:

- Martes a viernes de 10:00 a 14:00 horas y de 18:00 a 20:00 horas.
- Sábados, domingos y festivos de 9:30 a 20:00 horas.

Agosto: martes a domingos de 10 a 14 horas.
Último pase de visita 15 minutos antes del cierre.
El templo permanece cerrado:

- Todos los lunes.
- Los festivos 1 y 6 de enero, 1 de mayo, 25 de diciembre.


LOCALIZACIÓN Y COMUNICACIONES:
TREN: Estación de Príncipe Pío.
METRO:

- Estación de Plaza de España, líneas 3 y 10.
- Estación de Ventura Rodríguez, línea 3.

AUTOBÚS:

- Línea 74, paradas en la calle Ferraz, frente al Templo, y en la calle Pintor Rosales.
- Líneas 25, 39, 46, 75, 138 y C1, parada de Cuesta de San Vicente-Cadarso.
- Líneas 3, 44, 133, 148 y C2, parada en la Plaza de España.
- Líneas 1, 2, 74, parada de Princesa-Ventura Rodríguez.

BUS TURÍSTICO: Ruta 1, parada 10-Templo de Debod.

COCHE: Aparcamiento público más cercano en Plaza de España.


Estos datos se han tomado, en marzo de 2013, de la página oficial del Templo de Debod, no haciéndose una Ventana desde Madrid (uVdM) responsable de las posibles modificaciones de horarios y otros datos que puedan llevar a cabo en el futuro los organismos aquí citados.


BIBLIOGRAFIA Y ENLACES EXTERNOS:
- Carmen Priego y Alfonso Martín Flores: "Templo de Debod"; Ayuntamiento de Madrid, Tercera Tenencia de Alcaldía, Cultura y Medio Ambiente; Museos Municipales; ISBN: 84-606-0881-6; Depósito Legal: M. 22569-1992.
- Martín Almagro: "El Templo de Debod. Segunda edición, corregida y aumentada"; Instituto de Estudios Madrileños; Madrid, 1971; Depósito Legal: M. 30.225-1971.
- Templo de Debod. Ayuntamiento de Madrid.
- Templo de Debod. Memoria de Madrid
- DRAE

Página anterior    Inicio
Contacto con uVdM